A casi tres meses de la emergencia química, desde la seremi de Salud de Valparaíso anunciaron la clausura de la sucursal que funcionaba pese a la prohibición.
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La Seremi de Salud de Valparaíso clausuró la empresa donde fallecieron tres trabajadores, víctimas de una posible inhalación de ácido sulfhídrico en el barrio industrial de Concón en julio de este año.
A pesar de esto, la sede de Transportes Alberto Díaz continuaba operando pese a la prohibición de funcionamiento, la que se encontraba vigente desde el momento de la tragedia.
Personal de la secretaría regional de Salud acudió al lugar este lunes para fiscalizar luego de que fueran alertados de que la empresa estaba desacatando la prohibición de funcionamiento, donde constataron el incumplimiento de los permisos.
Sobre esto se refirió el Seremi de Salud de la región de Valparaíso, Georg Hübner, quien señalí que "determinamos la clausura del funcionamiento porque efectivamente vimos que habían operaciones que no estaban autorizadas, y en ese sentido, nuestro deber como Seremi es velar por el cumplimiento de la normativa y obviamente al ver que no se estaba cumpliendo con lo establecido se procedió a la clausura".
La decisión fue acogida por la defensa de las familias de los fallecidos, ya que señalan que entrega un sostén al argumento que sustenta la querella que presentarán, según consigna radio Biobío.
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