El Concejal viñamarino, quien busca su tercer periodo en el cargo, repasó con Puranoticia TV lo que han sido sus años como edil, donde ha fiscalizado tanto la gestión Reginato como la de Ripamonti. Justamente se refirió a las diferencias entre ambas, contó detalles de lo que fue su frustrada incursión por la Alcaldía e hizo un diagnóstico de la ciudad que tanto quiere,
Carlos Williams Arriola tiene 64 años, 45 de los cuales ha dedicado al mundo de las comunicaciones. Y es que justamente desde la tribuna que le ha dado hace 40 años la Radio Festival, este locutor radial ha podido recorrer la gran mayoría de los rincones de Viña del Mar. Esto, a su vez, junto al reconocimiento de la ciudadanía, lo ha posicionado hace ocho años como Concejal de la Ciudad Jardín. Y aunque su intención era competir por la Alcaldía, finalmente tuvo que resignarse a volver a postular por un escaño en el Concejo Municipal, cumpliendo así el máximo de tiempo que estipula la ley en el cargo.
En «La Entrevista», de Puranoticia TV, el edil que fue electo con la primera mayoría comunal cuando aún militaba en Renovación Nacional (RN) comentó lo que han sido sus más de siete años en el cargo, las diferencias que ha detectado entre lo que fue la cuestionada administración de Virginia Reginato y la actual gestión de Macarena Ripamonti, descartando de paso ser el "favorito" de la jefa comunal. De paso, contó detalles acerca de su fallida irrupción como candidato a la Alcaldía de Viña, instancia de la que fue bajado a raíz de una encuesta que ni él (ni nadie) ha visto jamás.
La conversación partió recordando que Williams llegó a la política tras algunas bromas de Ernesto Collao, uno de los locutores de Radio Festival, quien le propuso asumir una candidatura. No obstante, esta broma comenzó a tomar forma luego que la ex core y ex seremi de Vivienda, Evelyn Mansilla, lo instara a que postulara en representación de Renovación Nacional. Así fue como el hombre de radio decide inscribirse en el partido y competir por la Concejalía, cargo en el que está hace dos periodos.
Pero tras renunciar a RN, y con el apoyo decidido del diputado Andrés Celis, asumió el desafío de competir por la Alcaldía de Viña del Mar, quedando en una especie de terna junto al ex sacerdote Marcelo Catril y el arquitecto Iván Poduje. Pero sus pretensiones se vinieron a tierra producto de una supuesta encuesta que mostraba que el profesional capitalino tenía más posibilidades que los otros dos. "No la vi, pero sí acepté las condiciones y no podía poner en duda lo que me dijo personalmente el presidente de Renovación Nacional, por lo tanto lo acaté", afirmó Carlos Williams.
Respecto al respaldo que ha sentido en RN, manifestó que "yo he sentido el respaldo de Andrés Celis, que ha sido incondicional, que me conoce, que sabe de mi trayectoria, de mi llegada con la gente, y pensó que tendrían que haberme dado el apoyo, pero no fue así. Lo acepto, no sé si lo comparto, pero lo acepto".
Y continuó su crítica diciendo que la derecha en la ciudad es "demasiado elitista", situación que a su juicio "no mide la realidad del Viña de hoy. Ya dejamos de ser la ciudad donde vivían aristócratas. Hoy Viña es del pueblo, de la ciudadanía común y corriente, del trabajador. Ya no existe ese ABC1 tan notorio que se daba a conocer a todo el país como una ciudad de élite. Eso quedó en el pasado".
Si hay una autoridad que puede hablar con conocimiento de causa respecto de lo que fue la administración de Virginia Reginato y lo que está siendo la gestión de Macarena Ripamonti, es justamente Carlos Williams, concejal de Viña del Mar en ambos periodos.
De la ex jefa comunal, el edil independiente (ex RN) expuso que "creo que los primeros años del gobierno comunal de la señora Virginia fueron extraordinariamente buenos, los primeros ocho años, con muchos progresos para Viña. Pero pasó el tiempo y eso fue quedando atrás, y aparecieron personas que no tenían como objetivo engrandecer la ciudad, había más defensa de los intereses personales. Eso llevó a que la Alcaldesa se hundiera y que se presentara esta acusación, de la que no fui parte, lo que no significa que no haya hecho oposición".
Por su parte, de la gestión Ripamonti destacó que una de las principales diferencias que tiene con su antecesora es que "en mi caso personal, uno puede sugerir, que puede que te tomen en cuenta o no". Consultado si sentía el favorito de la Alcaldesa, Williams aseguró tajante que "yo creo que no". Pese a ello, valora que "me ha tocado presidir muchos concejos, aunque tengo un par de concejos menos este último año".
También dijo que su relación con la jefa municipal actual es "de mucho respeto. Ella respeta mi trabajo y yo la respeto a ella como primera autoridad comunal. Me ha escuchado, pero también lo ha hecho su administrador municipal, su jefe de gabinete, cosa que en el gobierno comunal anterior no pasaba". El trato que tiene con las autoridades actuales es calificado como "muy bueno, porque tú estás trabajando no por lucimiento personal, sino que por engrandecer tu ciudad y el de la gente de tu ciudad, entonces si no te escuchan eso se va al tacho de la basura".
El concejal Carlos Williams continuó su análisis de la ciudad señalando en entrevista con Puranoticia TV que la delincuencia e inseguridad han hecho mella en Viña del Mar, cuestión que ha ido deteriorando la calidad de vida que hace algunos años había.
"Yo pienso que en nuestra ciudad lamentablemente la inseguridad se ha hecho un festín. Hoy no podemos caminar en la noche como, por ejemplo, recuerdo la Copa América, donde periodistas del extranjero, los brasileños, nos comentaban que era lindo terminar la labor en el estadio e ir al centro, caminar sin temor, porque eso no se puede hacer en Brasil. Éramos cuidadosos de tener una ciudad limpia y ordenada, pero con el paso de los años esto fue quedando atrás y la ciudad comenzó a deteriorarse", comentó el candidato al Concejo Municipal.
Pero, ¿de dónde viene este deterioro del que habla? A juicio de Carlos Williams, "estamos hablando de una ciudad muy atractiva, pero también de la ciudad con más campamentos, y eso es porque vivir en Viña del Mar te da un plus y se fue creando este tipo de población en sectores periféricos y lamentablemente no toda la gente que llegó era merecedora a lo que nosotros explotábamos como ciudad al exterior y eso fue deteriorando nuestra calidad de vida".
En base a este análisis, confesó que para los próximos cuatro años le gustaría "solucionar el grave problema de los viñamarinos: la seguridad. Para mí, era fundamental ofrecer seguridad, gestionando con el alto mando de Carabineros la mayor cantidad de efefctivos, teniendo mejor iluminación en los barrios. La policía municipal no tiene facultades, habría que legislar y darle herramientas para actuar".
Finalmente expuso que a la ciudad le faltan "más recursos para más inspectores municipales, más patrulleros de Seguridad Ciudadana, más motocicletas y más personal para tener más turnos con gente en las calles, más presencia".
Puedes revisar la entrevista completa aquí:
PURANOTICIA