Valeria Melipillán, en representación de la Corporación Municipal, presentó una denuncia por la existencia de saldos no acreditados al Ministerio de Educación, desde el año 2013 al año 2018, equivalentes a $2.400 millones.
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Una denuncia por la existencia de saldos no acreditados al Ministerio de Educación, desde el año 2013 al año 2018, bajo la administración de Mauricio Viñambres, presentó la alcaldesa de Quilpué, Valeria Melipillán, ante la Fiscalía Local, en su calidad de presidenta de la Corporación Municipal.
La autoridad comunal precisó que el objetivo de esta denuncia es solicitar una investigación para dilucidar si los $2.400 millones no acreditados corresponden –o no– a un delito de malversación de fondos públicos.
Melipillán explicó en compañía del equipo directivo de la Corporación, que "estamos apuntando a la probidad y a transparentar la situación anterior que dejó la administración de Mauricio Viñambres".
"Se están realizando diversas auditorías y, una de esas auditorías externas realizada a la Corporación, nos arrojó como resultado un saldo sin rendir de $2.400 millones. Ese saldo implica un impacto importante para la Corporación Municipal, ya que considera un descuento de la subvención que deberían recibir los establecimientos educacionales", agregó la autoridad.
La militante de Convergencia Social también dijo que "creemos que es muy importante investigar por qué estos saldos no aparecen rendidos y por qué durante todos estos años no se ha podido clarificar en qué se gastaron esos dineros".
Además, reveló que "buscamos que se investigue, que la Fiscalía pueda llegar hasta las últimas instancias, para encontrar quiénes son los responsables, donde esta responsabilidad podría recaer tanto en el Secretario General de la Corporación como en el Alcalde saliente”.
Cabe mencionar que la auditoría llevada a cabo por la consultora Vegott Contabilidad a la Corporación Municipal de Quilpué contempló desde los años 2016 en adelante, para ver la subvención general y también los fondos SEP, FAEP y otros.
En esta investigación se detectó que existen saldos no acreditados, lo que significa que los dineros entregados desde el Ministerio de Educación no fueron rendidos por la Corporación Municipal de Quilpué.
Marcelo Lillo, director jurídico de la Corporación Municipal de Quilpué, explicó que "estamos investigando de manera interna con la Unidad de Control, para determinar si esos fondos efectivamente fueron rendidos en otros conceptos o, bien, derechamente fue gastado en conceptos que no corresponden en el ámbito educacional y, de esa manera, se podrían configurar ciertos delitos, como el de malversación de fondos públicos".
Sobre el desarrollo de la investigación, el directivo prosiguió indicando que “en la medida que vayamos presentando los antecedentes, iremos avanzando en la investigación del Ministerio Público, pero la idea obviamente es avanzar con la mayor rapidez y eficiencia posible”.
Cabe destacar que la no acreditación de dichos saldos ha significado la disminución de la subvención que entrega el Mineduc año a año a los establecimientos municipales de la Ciudad del Sol.
Falta de rigurosidad en la contabilización y debilidades en el control interno; y un sistema contable deficiente, con nulo sistema de soporte, fueron otros de los hallazgos que dejó la auditoría realizada por la consultora externa.
Víctor Ramos, secretario general de la Corporación, sostuvo que tenían "un diseño de informalidad premeditado. No existía un área de contabilidad a la altura de una organización como ésta. Estamos hablando de una organización que maneja más de $35.000 millones al año, siendo uno de los principales empleadores de la región, con más de 2.000 personas a su cargo".
"Cuando tienes ese volumen financiero y no tienes un departamento contable para hacer tu propia contabilidad, ahí hay un diseño premeditado para que eso no ocurra. Nadie puede creer que durante tanto tiempo una organización así de grande no tuviese la capacidad de generar su propia contabilidad", añadió.
Sumado a esto, Ramos expuso que “otra cosa que descubrimos es que los estados contables que se presentaban como auditorías externas no eran tal, sino que eran auditorías internas, era una contratación de una consultora para que hiciera la contabilidad a fin de año y luego era publicada como auditoría externa. Eso es grave y es engañar derechamente, porque deberían haber dicho que estaban contratando servicios externos, porque no tenían la posibilidad y la capacidad de generar su propia contabilidad, pero no lo hicieron”.
Finalmente, la alcaldesa Valeria Melipillán mencionó que “sumado a esta denuncia, hoy día estamos esperando el resultado de las auditorías de la Municipalidad. Tenemos una auditoria legal que ya está en curso sobre proyectos que, conocemos, son proyectos fallidos de la Municipalidad, como las piscinas de Villa Olímpica, el CIAM, algunos contratos de gran valor, que estamos esperando los resultados”.
PURANOTICIA
