Agenda mediática trasandina consignó la alta cifra de compatriotas que atravesó el Paso Los Libertadores por el fin de semana largo. Autoridades analizan atochamientos.
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Entre el miércoles 5 de abril y el viernes 7, cerca de 28 mil viajeros cruzaron la frontera entre Argentina y Chile, según consignó a Clarín Juan Manuel Serrano, delegado de Migraciones del paso Cristo Redentor. Con filas de hasta tres y cuatro horas en la Aduana, el hito posicionó al paso fronterizo como el segundo más importante de la república vecina.
Atraídos por la rentabilidad del cambio, chilenos y chilenas atravesaron la cordillera de Los Andes con sus automóviles llenos de aceite, café, salsa, harina, arroz, leche, pañales y productos de limpieza. "Todo vale dos o tres veces más barato que en Santiago", afirmó una chilena a Mega en un móvil realizado por el canal en el paso fronterizo.
"Nos dimos cuenta por internet que estaba más barato. El envase de un litro de enjuague para la ropa sale 3.500 persos chilenos, y allá en Chile, 16 mil pesos", destacó un viajero en el mismo despacho.
A raíz de esto, y para prevenir el comercio "con fines comerciales", las autoridades nacionales reforzaron el personal de aduanas incorporando 20 detectives de la PDI, 17 funcionarios de aduanas y 20 del Servicio Agrícola Ganadero. Sin embargo, las filas alcanzaron extensiones kilométricas.
Al respecto, la seremi de gobierno y delegada presidencial provincial (s) Danitza Ortíz, detalló que escenarios como éste obligan al gobierno a "mejorar el cómo se gestiona y administra" el paso fronterizo.
El jefe del Centro de Fronteras y Coordinador del Paso Internacional, Justo José Bascolo, habría dicho a Clarín que ingresaron "cerca de 28.000 viajeros, 18 mil personas que ingresaron a la Argentina y 9.500 que salieron hacia Chile".
(Imágenes: Limay Noticias)
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