La investigación dejó en evidencia que el cerebro no puede hacerle frente a más de dos cosas a la vez.
La verdadera razón por la que la gente cierra los ojos al besar no es tan romántica como se cree, y así lo demostró un grupo de académicos de la Universidad de Londres.
La investigación dejó en evidencia que el cerebro no puede hacerle frente a más de dos cosas a la vez.
Por lo mismo, cuando la gente junta los labios para besar, esta parte de nuestro organismo tiene dificultades para procesar la sensación si el poder cognitivo también está siendo utilizado para analizar lo que se visualiza.
"La conciencia táctil depende del nivel de carga perceptual que realiza en simultáneo -como sería abrir los ojos y besar-", aclararon Polly Dalton y Sandra Murphy, académicas detrás del estudio.
"Si nos concentramos en gran medida a una tarea visual, esto reducirá la conciencia de los estímulos en otros sentidos", agregó Dalton.
Dado que besarse, bailar o tener sexo son actividades que requieren la atención del sentido del tacto para que sean más placenteras, distrae la atención de otros sentidos, como la vista, que se anulan para intensificar la experiencia del contacto.
"Estos resultados podrían explicar por qué cerramos los ojos cuando queremos centrar la atención en otro sentido. Cerrar el paso a la entrada visual deja más recursos mentales para centrarse en otros aspectos de nuestra experiencia", concluyó la experta.