Usuarios del Centro de Educación y Trabajo La Pólvora, en Valparaíso, fueron los encargados de la confección de los elementos de seguridad personal.
Desde la primera semana de abril, un grupo de 12 internos del Centro de Educación y Trabajo (CET) La Pólvora se encuentran confeccionando mascarillas lavables y antifluidos para el personal de Gendarmería.
Este trabajo permitió que se comenzaran a entregar más de 1.000 barbijos, destinados a todo el personal de dicha institución en la región de Valparaíso.
El personal del CET, ubicado en el complejo penitenciario de Valparaíso, efectuó una primera entrega a los funcionarios, oportunidad en la que se distribuyeron más de 600 de estos artículos de protección y se incluyó a los efectivos de la cárcel de hombres y mujeres, Equipo de Canes Adiestrados, Unidad de Servicios Especiales Penitenciarios y el mismo CET.
El jefe del Centro, teniente primero Patricio Bocaz, afirmó que "vamos a completar la entrega para la totalidad de las unidades penales de la región de Valparaíso. En el transcurso de la semana se van a terminar por entregar 1.074 mascarillas, correspondiente a la totalidad de los funcionarios de las unidades penales de la región".
Una de las unidades que ya retiró los barbijos es el Centro de Detención Preventiva de Casablanca.
El Jefe de unidad (s), suboficial mayor, Efraín López, señaló que "se les va a entregar por planilla escrita, para el cuidado del Covid-19. Ya se ha hecho entrega de mascarillas a los funcionarios bajo firma. Tenemos alcohol gel, que se ubican en la guardia armada y guardia interna y detector de temperatura, que se le toma a toda persona que ingrese a la unidad penal, sean internos, funcionarios o gente que venga a dejar encomiendas".
Con la finalidad de poder cumplir con las 15.000 unidades requeridas por el departamento de logística de la dirección nacional del servicio, el CET se asoció con el Centro de Cumplimiento Penitenciario de San Felipe, donde también existe un taller de corte y confección.
Cabe destacar que las unidades penales de Limache y Quillota también se encuentran elaborando estos barbijos, tanto para la misma población penal como para empresas privadas.
A esta medida de prevención se suma que se mantienen suspendidas las visitas en todos los establecimientos penitenciarios. Esto ha llevado a que el servicio haya implementado las videollamadas en todas las unidades de la región.
Además en algunos penales existen teléfonos públicos en espacios de libre acceso para la población penal.
PURANOTICIA