José Ortíz expresó que "la buena fe y solidaridad de la gente, que fue multitudinaria el primer día de búsqueda, lamentablemente destrozó el sitio del suceso".
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El fiscal José Ortiz, a cargo de la investigación por la desaparición del niño Tomás Bravo en Arauco, entregó detalles de las diligencias, asegurando que las policías y Fiscalía están realizando las labores necesarias para esclarecer el hecho que ha conmovido a todo el país.
A una semana desde que se conoció la noticia, se han planteado distintas hipótesis respecto a lo que le pudo haber sucedido al niño de 3 años. Sin embargo, la autoridad manifestó su preocupación por lo alterado que está el sitio del suceso, que abarca al menos ocho kilómetros a la redonda. Debido a ello, se definió darle total secreto al proceso investigativo.
"La buena fe y solidaridad de la gente, que fue multitudinaria el primer día en la búsqueda, lamentablemente destrozó el sitio del suceso. Al día siguiente tuvimos lluvia permanente todo el día que no fue ninguna colaboración a mantener el sitio del suceso, por eso lo que queremos hoy día es poder tener la investigación lo más seria, detallada y en reserva a fin de evitar que aparezcan comentarios e hipótesis de distinta naturaleza que pueden desviar los focos investigativos", sostuvo Ortiz.
Respecto a la investigación y sus distintos focos, planteó que "están claros, se están avanzando día a día en ellos y se están haciendo todas las diligencias. Estamos en permanente coordinación con las policías y encargados de búsqueda, y se están fortaleciendo los equipos de trabajo. Así como se incorporó la SIAT a trabajar la teoría del accidente (de tránsito), se incorporan otros funcionarios de la Bipe (Brigada de Investigaciones Policiales Especiales) de la PDI para efectos de apoyar en otras líneas investigativas".
De todas formas, el fiscal evitó dar mayores datos sobre las diligencias, ya que "hasta el día de hoy se está trabajando de manera seria, detallada, con una investigación en reserva a fin de evitar la contaminación o levantar teorías o castillos de arena que puedan dificultar más aún".
"Después de todas las dificultades que hubo al inicio por la alteración del sitio del suceso, y poder tener un final, ojalá, feliz con el tema o, al menos, un final que permita la tranquilidad de la familia", sentenció Ortiz.
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