Juzgado impuso, además, a J.C.M. el arresto domiciliario nocturno, entre las 21:00 horas y las 6:00 horas, por su mayor responsabilidad en los hechos, como jefe de la patrulla.
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El Juzgado de Garantía de Calama dejó sujetos a las medidas cautelares de arraigo nacional y la prohibición de acercarse a las víctimas a los integrantes de la patrulla del Ejército J.C.M., A.P.P., M.M.D., K.L.V., J.P.M. y J.V.V., imputados por el Ministerio Público como autores del delito de abuso contra particulares.
Dicho ilícito habría sido perpetrado en horas de la madrugada del sábado 18, al abandonar en medio del desierto a ocho civiles que habían infringido el toque de queda.
En la audiencia de formalización de la investigación, la magistrada María José Salas impuso, además, al imputado J.C.M. el arresto domiciliario nocturno, entre las 21:00 horas y las 6:00 horas del día siguiente, por su mayor responsabilidad en los hechos, como jefe de la patrulla.
Asimismo, el tribunal estableció un plazo de investigación de 70 días.
Según el ente persecutor, los imputados, en su calidad de militares, realizaron patrullajes preventivos durante la vigencia del toque de queda decretado por la emergencia sanitaria en el país, procediendo en dicho lapso a detener a 12 infractores de la norma.
De ellos, a ocho -las víctimas- se les informó que serían trasladados hasta el hospital Carlos Cisternas de Calama, para constatar lesiones.
Sin embargo, la patrulla, a cargo del imputado J.C.M., tomó rumbo a la localidad de Chiu Chiu, abandonando en pleno desierto a los ocho detenidos, tras amenazarlos con dispararles si no corrían.
Una de las víctimas logró comunicarse con un familiar, quien dio aviso a Carabineros, los que procedieron a la detención de los imputados.
PURANOTICIA
