Candidato de la Democracia Cristiana conversó con Puranoticia.cl acerca de su trayectoria relacionada a la política, la cual comenzó desde sus tiempos de estudiante y continuó ya en el ámbito profesional.
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Una candidatura en la que viene trabajando desde hace 17 años. Así describe Christian Cárdenas Silva su trabajo con miras a llegar a liderar la Alcaldía de Quilpué, proceso que lo tendrá como protagonista en la Elección Municipal del fin de semana del 15 y 16 de mayo y del cual conversó en extenso con Puranoticia.cl.
Haciendo un repaso no tan sólo por su vida como político y militante de la Democracia Cristiana (DC), sino que también abriéndose a mostrar su versión más humana, esa que lo llevó a estudiar en el colegio Seminario San Rafael de Valparaíso desde kinder hasta cuarto año medio, 'bullying' incluido de parte de sus compañeros por viajar desde "el interior".
Y es que en su etapa escolar cambió su domicilio de Valparaíso a Quilpué, donde junto a sus padres llegó a constituirse al barrio Valencia, desde donde también inició su camino en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) como estudiante de Ingeniería Civil Química, la cual no le gustó, por lo que terminó optando por la incipiente carrera de Nutrición y Dietética en la Universidad de Valparaíso (UV), en la calle Gran Bretaña del cerro Playa Ancha.
Fue justamente durante su enseñanza académica donde el ex Gobernador de Marga Marga comenzó a tomarle el gustito a la política, ya sea a través del Centro de Alumnos de su colegio, como también en las misiones que desarrollaba en el sur, a las que viajaba por un mes completo para desarrollar trabajos sociales, lo que finalmente le indicaron el camino a seguir, tal como lo manifestó el candidato de Unidad Constituyente a la Alcaldía de Quilpué, en conversación con Puranoticia.cl.
Ya se conoce de Christian Cárdenas como político, su carrera como Concejal y también como Gobernador, pero queremos conocer más del Christian Cárdenas humano.
- Bueno. Tengo 38 años. Nací en un hospital que hoy ya no existe, que es el Hospital Deformes, en Valparaíso. Mis padres son de Valparaíso, mi madre del cerro San Juan de Dios, mi padre vivía un poco más abajo. Actualmente está el Congreso Nacional en ese lugar.
¿En qué colegio estudió?
- Estudié en el colegio Seminario San Rafael, sede Valparaíso, desde kinder a cuarto medio. Muchos de mis amigos me molestaban porque venía de Quilpué y tenía que tomar más de una locomoción. Nos molestaban porque veníamos del interior y fue una situación bien especial.
¿Cuándo llega a Quilpué?
- Yo llegué muy joven. Con mis padres nos vinimos cuando era muy niño, no recuerdo el año específico, pero mis padres eran muy jóvenes, y mi hermano nació en el Hospital de Quilpué, así que él es 100% quilpueíno. Nos establecimos en el barrio Valencia y de ahí hasta el día de hoy que siguen viviendo ahí y yo vivo en el barrio El Retiro.
¿En qué universidad?
- Yo salí del colegio a los 17 años. Di la Prueba de Aptitud Académica (PAA), tenía buenas calificaciones en el colegio y tenía varias opciones. Opté por Ingeniería Civil Química en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, pero con los números no era muy amigo, así que mi padre me pregunta si me gusta la carrera y le digo que no era lo mío. De ahí, a través de un folleto, me entero de la carrera de Nutrición y Dietética, orientada a la salud y a lo que se venía con la obesidad y enfermedades crónicas. Así que estudié eso en la Universidad de Valparaíso, en el cerro Playa Ancha. Obtuve un mejor puntaje en la PAA. Tuve varias actividades, fui ayudante de ramo en la carrera, ayudante de Biología, fui presidente del Centro de Alumnos, secretario del Centro de Alumnos, fui tesorero de la Federación de Estudiantes.
¿Ahí nace el gustito político?
- Yo creo que el gustito político nació de antes. En el colegio estaba en el Centro de Alumnos, estaba en catequesis, estuve en el coro, en deporte, en gimnasia, en la selección de fútbol. Entonces nunca estuve quieto, siempre participaba en las actividades. Mi vocación por el servicio público nace cuando tuve la posibilidad de hacer misiones, que era un mes completo en el sur de Chile, en sectores como Lonquimay, Lolén, lugares donde no llega la tecnología, donde no llegábamos a profesar la palabra de Dios, sino que conversábamos con la gente, cooperábamos con las comundiades, levantamos una capilla, la pintamos y nos dimos cuenta que Chile no termina en Paso Hondo, sino que va más allá.
¿El sacerdocio se le pasó por la cabeza?
- No, nunca.
Usted hablaba de fútbol: ¿Hincha de qué equipo?
- Por la región, soy hincha de Santiago Wanderers, pero también soy hincha, por un tema familiar, de la Universidad Católica, por mi hermano y mi papá, que también es del Everton. Tengo muy buena relación con el presidente de Santiago Wanderers. No soy fanático, pero mi hijo del medio es socio de niño y tiene su camiseta.
Cuéntenos acerca de su familia: ¿quiénes la componen?
- La componen mis padres, que están vivos; y mi hermano menor, que tiene 30. Hoy mi familia es Paulina, mi señora; mi hija Emilia, de 11 años; Tomás, de 6 años; y Mariano, que tiene 4 años y quien es el que nos revuelve el gallinero dentro de la casa.
Usted, a pesar de su juventud, tiene una experiencia política que ya se la quisiera cualquiera. Bajo este contexto, ¿cómo es que nace su candidatura a la Alcaldía de Quilpué? ¿Siempre fue su anhelo o los años lo cruzaron con este objetivo?
- Yo creo que hoy, lo que nos motivó a decir que tenemos la oportunidad, porque nos hemos ganado el derecho, pero más que eso, siento que hemos hecho un trabajo por tanto tiempo, no sólo como autoridad, sino que cuando tenía 20 o 21 años y organizábamos reuniones con niños, actividades de Fiestas Patrias, actividades donde uno vivía. Y eso significa que nosotros hoy día no estamos mostrando una candidatura que sólo vaya a decir que haré todos los cambios posibles porque todo está malo. Llevamos años haciendo luchas sociales sin redes sociales.
Trabajamos con la feria de Valencia para que Cencosud no los sacara; vimos problemáticas con vertederos en Quilpué; trabajamos con comunidades en diversos problemas y conflictos. Entonces, siempre estuvimos en la calle, presentes. Y por eso decimos que queremos ser candidato a Alcalde porque creemos que después de 15 años tenemos la experiencia, tanto política como territorial, porque sabemos lo que ocurre en nuestra ciudad, porque hemos vivido, participado, llorado, crecido y optado para que ésta sea una de las ciudades más importantes de la región de Valparaíso.
Si bien, hay que ir paso a paso en la vida, nos gustaría saber cómo proyecta su carrera política en los próximos años. Si le va bien en las Municipales, ¿cree que un segundo período sería lo ideal o quizás sus metas lo llevan al Congreso o a otro cargo?
- Mira, yo creo que hoy hay que ir paso a paso. Como dijo San Pablo, cada día tiene su afán. Hoy lo importante es ganar esta elección, partiendo porque el período va a ser mucho más corto que lo normal, con tres años y medio y no cuatro, así que tendremos que hacer una rápida aceleración para que los proyectos salgan lo más rápido posible. Cuando asumí como Concejal dije que estaría ocho años como Concejal, y estuve ocho años, cumpliendo la propuesta que teníamos.
Nosotros entendemos que un cargo como Alcalde es muy difícil que todos los cambios se hagan en cuatro años de primera, pero si tenemos la posibilidad que una consolidación se pueda hacer en ocho años. Lo bueno es que hoy existe un límite de reelecciones, así que en ocho años habría que evaluar si efectivamente nuestro programa ha sido llevado a cabo como hemos querido y ver después si se reevalúa un tercer período.
Usted obtuvo una votación importante cuando fue electo concejal. Cuéntenos de eso y de su experiencia como edil de Quilpué: ¿Qué fue lo positivo y negativo de este período?
- Yo creo que cuando asume una Concejalía, que lo hice con 24 años, creo que uno de los más jóvenes de esta ciudad. La verdad es que para nosotros no fue ganar la elección, nosotros siempre quisimos ser candidatos para en una segunda oportunidad aspirar a una candidatura más formal. En ese tiempo habían tres cupos, tuvimos que competir con históricos militantes de la Democracia Cristiana, y nosotros sin mayor conocimiento nos empezamos a hacer conocidos con acciones sociales y cuando logramos el cupo para ser candidato dijimos que había que pelear para ganar.
Así se genera una mística muy interesante, con muchos jóvenes, que somos los mismos del año 2008, con una lealtad que se ha mantenido por el tiempo. Entonces esta mística nos dio el triunfo el 2008 con una quinta mayoría como Concejal. Después trabajamos los cuatro años sin parar, hasta el 2012, donde obtuvimos la primera mayoría. Ahí seguimos trabajando cuatro años en la calle, con la gente, de lunes a domingo muchas veces, sólo descansando en febrero.
Usted también fue uno de los gobernadores más jóvenes del país cuando asumió en Marga Marga. Háblenos de aquello y también de su experiencia al mando de la provincia.
- Yo creo que fue una de las experiencias que a mí más me ha gustado, porque el cargo de Gobernador es un representante territorial, de la Presidencia de la República y del Ministerio del Interior, por lo tanto es un cargo que tiene un alto rango. Entonces, siento que dos años para mi gusto fueron pocos, creo que quedaron cosas inconclusas para trabajar con la comunidad. Lo bueno es que muchas personas, y yo tengo los mejores recuerdos, es que aportamos un granito de arena en la provincia de Marga Marga.
Logramos instalar la oficina de Junaeb en Villa Alemana, es decir los jóvenes no tenían que ir a Viña del Mar; también hicimos una donación de cuatro drones, coordinado junto a Rotary Club Internacional y un Rotary de Estados Unidos, donde empezamos en esos años, antes del boom de los drones, para entregarlos a Bomberos. De hecho, Bomberos me ha dicho que ha sido muy bien utilizado. Entonces son iniciativas que han generado impacto en la provincia. También logramos implementar una aplicación móvil, que era una alarma comunitaria a través de celulares, en un proyecto bien evaluado a nivel nacional, pero que no pudimos continuar porque nos tuvimos que ir y los recursos se destinaron a otras cosas.
Lo último: ¿por qué la gente tiene que votar por Christian Cárdenas? ¿Qué lo diferencia del resto de los candidatos?
- Votar por Christian Cárdenas es porque hemos hecho un trabajo territorial permanente, no somos de los que aparecemos cada cuatro años. Nos hemos preocupado de los problemas de la ciudadanía, hemos estado en permanente comunicación con los ciudadanos, y creo que esa es una tarjeta de presentación que a nosotros siempre nos llena de orgullos, porque creemos que las autoridades hoy deben estar en terreno. Eso creo que marca la diferencia con otras candidaturas.
Y segundo, porque tenemos un programa pensado no sólo para los cuatro años, sino que para los 30 años, porque queremos transformar Quilpué y revolucionar en el desarrollo de esta comuna, que hoy se han colocado los cimientos suficientes para embellecerla, mejorarla y desarrollarla como nunca antes. Esa es la meta, porque vivimos en Quilpué, vamos a seguir viviendo en Quilpué, y porque quiero lo mejor para nuestros hijos y nietos y por las personas que necesitan ver a la comuna con una mirada mucho más moderna, con menos descentralización, con respuestas más ágiles y rápidas de los servicios públicos, con un Municipio más humano, más amigable y en permanente contacto con los barrios de cada sector.
PURANOTICIA
