Reportaje de The Clinic consigna, según antecedentes de Fiscalía, que no hubo participación de terceras personas en la muerte del joven dirigente.
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Un reportaje de The Clinic reveló que Alejandro Castro, el activista medioambiental de Quintero que fue encontrado sin vida a un costado de la vía férrea de Metro Valparaíso, murió de una asfixia por estrangulamiento, vía suicidio, descartando consigo la tesis del homicidio y una oscura conspiración que involucraba a Carabineros.
Cabe recordar que todo se originó en momentos en que los ánimos se encontraban muy caldeados en las comunas de Quintero y Puchuncaví, debido a los episodios de contaminación que afectaron a la zona y que dejaron más de 600 personas con síntomas de intoxicación durante los meses de agosto y septiembre.
En rechazo a esta situación, el 3 de octubre del 2018 se organizó una manifestación en Valparaíso, sede del Poder Legislativo y del Gobierno Regional de Valparaíso, donde se dio a conocer el rechazo de la población ante lo que ellos consideraban un nulo actuar. Con el paso de las horas, se confirmó que uno de los asistentes a la protesta: el joven dirigente Alejandro Castro, había muerto.
Colgado de los tirantes de su mochila, frente a la rejas que separan el puerto de Valparaíso con la línea férrea, y a cinco centímetros de tocar suelo, el hombre fue encontrado sin vida, dando paso a una serie de teorías que relacionaba el hecho con una amenaza que habría recibido por parte de supuestos funcionarios de Fuerzas Especiales de Carabineros.
Pese a toda esta situación, este jueves 21 se confirmó fehacientemente que el joven se suicidó. Según cercanos, que fueron consultados por el medio de comunicación, Castro vivía abrumado por las ansias de cambiar el mundo, además de una tristeza y un dolor que no lo dejaron vivir: la muerte de su pequeña hija Giuliana, a los cuatro meses, en 2016.
Los mismos cercanos al joven confesaron que desde este momento su vida cambió, registrando episodios de ira que traducía en lanzamiento de objetos domésticos, exceso de alcohol y consumo de drogas; todas, situaciones que le fueron desencadenando una profunda depresión.
De igual forma, consignan que a partir de la muerte de su bebé, Alejandro desarrolló una "patología no diagnosticada", la cualnunca trató médicamente, y que habría sido fundamental al momento de tomar la decisión de quitarse la vida. De hecho, familiares y amigos confesaron que Castro intentó quitarse la vida en dos ocasiones previas.
Según The Clinic, los informes de la fiscal Greta Fuchslocher revelan que en la muerte de Alejandro Castro no hubo participación de terceras personas, agregando que "debido a las presuntas amenazas que tenía por parte de Carabineros, fue elevado como un mártir, pero ello es una nebulosa, una ficción", según citan a una fuente anónima.
PURANOTICIA
