La Comisión de Minería y Energía del Senado recibió en sesión telemática al director de la Empresa Nacional del Petróleo, y a su gerente general, quienes informaron las medidas adoptadas por la compañía para enfrentar los efectos de la pandemia.
La Comisión de Minería y Energía del Senado recibió en una sesión telemática al director de la Empresa Nacional del Petróleo, José Luis Mardones, y a su gerente general, Andrés Roccatagliata, con el fin de conocer las medidas adoptadas por la compañía para enfrentar los efectos de la pandemia por Covid-19.
Inicialmente y lo que muchos entendieron tras la presentación es que la empresa estaba informando de una millonaria perdida al Senado, sin embargo y tras comunicación directa con la empresa, Puranoticia.cl pudo constatar que el objetivo era informar de las medidas adoptadas por la presidencia y gerencia de la empresa justamente para minimizar las perdidas, que en caso de no haberlas realizado podría haber generado 500 millones de dólares en deuda en tiempos de la pandemia del Coronavirus en el país.
Roccatagliata explicó que la pandemia generó una crisis de proporciones históricas para las empresas del rubro a nivel global, lo que ha obligado a las principales refinerías del mundo a disminuir drásticamente sus operaciones o derechamente cerrar.
Entre otros efectos, los márgenes de refinación proyectados para 2020 son 75% inferiores a los de 2019, incluso considerando una importante mejoría en el último trimestre. Esto plantea un escenario altamente complejo, al punto que, entre mayo y junio de este año, un barril refinado era más barato que un barril de crudo. Durante el primer trimestre, los efectos de los factores externos fueron compensados parcialmente por los esfuerzos realizados por la empresa para reducir costos fijos por US$ 23 millones, principalmente gastos de administración y transporte marítimo y efecto de tipo de cambio en costos de personal. En este periodo ENAP reportó una pérdida de US$ 34,2 millones.
Entre otras medidas para minimizar pérdidas, explicó Roccatagliata, ENAP adquirió un stock de seguridad adicional de 240 mil metros cúbicos comprados en marzo. Y aunque no era el objetivo, este stock produjo un beneficio, porque refinar en Chile con márgenes negativos produce pérdidas.
En paralelo, ENAP ajustó el programa de refinación para la nueva demanda; creó un comité especial para la captura de sinergias y ahorros, con una meta de US$ 100 millones, que se va actualizando; redujo 40% del plan de inversión (US$ 200 millones); el 99% de los ejecutivos renunciaron voluntariamente a los incentivos variables 2020 y acordó una reducción de parte de bonos o beneficios pactados para el año 2020 en la mayoría de los sindicatos.
Además, la compañía implementó una política de austeridad, eliminando todo tipo de gastos que no sean estrictamente necesarios (horas extraordinarias, suspensión de contrataciones, entre otras); adelantó la mantención de Refinería Biobío; detuvo la perforación de pozos e implementó un Concurso interno con 130 iniciativas de ahorro. Además, suscribió un acuerdo con Argentina por hasta 1,3 MMm3 de gas, anticipando alguna contingencia en la operación en Magallanes.
Todo esto además se enmarca en un plan maestro que busca cuidar la salud de los trabajadores, garantizar el suministro de combustibles y justamente adoptar las medidas necesarias para disminuir las pérdidas que se producirán por los efectos de la crisis actual.
PURANOTICIA