Los datos obtenidos tras la encuesta Casen y el estudio de la Fundación Sol dejan como conclusión que es necesario reformular el ingreso mínimo.
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Según la ley Nº 20.763, el ingreso mínimo mensual para los trabajadores chileno mayores de 18 y hasta los 65 años es de $225.000. Con el reajuste para este año, a contar de julio aumentará a $241.000 y el 2016 alcanzará los $250.000.
Unos datos que contrastan con la realidad que representó el Fondo Monetario Internacional, que identifica el PIB chileno per capita en US$23.120, donde cada ciudadano recibiría, en promedio, 1,2 millones al mes. Y que se pone en evidencia aún más con lo mostrado por la Fundación Sol en su estudio "Los verdaderos sueldos de Chile", que concluyó que más de la mitad de los trabajadores en el país recibe, realmente, menos de 300 mil pesos mensuales.
Con estas cifras, y tomando en cuenta que la gran mayoría de las personas percibe ingresos cercanos al mínimo, cabe la pregunta a destacar. ¿Cuánto nos permite gastar con el sueldo mínimo? ¿Nos alcanza para costear los gastos del mes?
En Santiago, considerada una de las ciudades más caras para vivir en la región, el pasaje de la locomoción colectiva tradicional, el Transantiago, es de $640 en buses y de $720 en Metro en horario punta. Tomando en cuenta que más de 2 millones de personas se desplazan al día en el tren subterráneo, y con una jornada laboral de cinco días a la semana, tendrá que desembolsar $7.200 cada siete días y $28.800 al mes.
Si toma desayuno y almuerzo en el trabajo, gastará $3.500 por jornada y $70.000 cada 30 días.
Ahora, si sumas gastos por energía, agua, gas, teléfono, comida, tus ingresos disminuirán en unos $100 mil pesos más. Es decir, no te queda más que 20 mil pesos hasta el próximo pago. Y si tienes que costear gastos de tu familia o pagos propios, sabrás que no te quedará otra alternativa que recurrir al endeudamiento, reduciendo todo en un círculo viciosos en el que cada vez te verás en peores condiciones.
Como dato, los distintos países que integran la OCDE, cuando tenían el mismo nivel económico que Chile, duplicaban el sueldo mínimo que tenemos en la actualidad. Así lo considera el economista Marco Kremerman, quien toma el ejemplo en la Unión Europea para representar que "la mediana salarial en Chile debería ser un 94,3% más alta, en comparación con países en igualdad de condiciones como Croacia o Polonia".
"Vivir en Chile con el sueldo mínimo es imposible y no deja más alternativa que endeudarse", añade.
Esta problemática genera preocupación por el lento avance de la remuneración, que según las expectativas de Gobierno, subirá apenas 25 mil pesos de aquí al 2016.
AGENCIA TRAYECTOS
