Se dio el puntapié inicial para que los 155 constituyentes electos inicien la redacción de lo que será la "nueva constitución" de Chile.
Para las 10:00 del próximo domingo 4 de julio en la sede de Santiago del Congreso Nacional, el Presidente Sebastián Piñera fijó la primera sesión de la Convención Constitucional.
Así lo informó el Mandatario desde el Palacio de La Moneda, donde junto al ministro del Interior, Rodrigo Delgado, y el de la Segpres, Juan José Ossa, firmó el decreto que da el puntapié para que 155 constitucionales electos inicien la redacción de una nueva Constitución para nuestro país.
"Esta Convención Constitucional deberá, en un plazo de nueve meses, prorrogable por tres meses adicionales, redactar y aprobar una nueva Constitución para Chile, la que deberá ser ratificada por la ciudadanía a través de un plebiscito", indicó el Presidente de la República.
Además, el jefe de Estado recordó las atribuciones y limitaciones que tendrá la Convención, la cual aseguró "deberá respetar el carácter de República que tiene el Estado de Chile, su régimen democrático, las sentencias judiciales firmes y ejecutoriadas y los tratados internacionales ratificados y que se encuentran vigentes".
Advirtió que "no podrá poner término anticipado al periodo de las autoridades elegidas por votación popular" ni "atribuirse el ejercicio de la soberanía ni asumir otras atribuciones que no han sido expresamente conferidas".
El Presidente recalcó que el Ejecutivo prestará "todo el apoyo técnico, financiero y administrativo necesario para su instalación y funcionamiento".
Finalmente, el Gobernante hizo un llamado a la ciudadanía a participar en el proceso: "Para que de esta forma, la ley madre, nuestra Constitución, la ley madre de nuestra democracia, tenga el respeto de todos los chilenos".
"Es esencial, porque la nueva Constitución debe recoger nuestras tradiciones republicanas y los valores esenciales que viven en el alma de nuestro pueblo. También debe recoger el aporte de las generaciones pasadas, la voluntad de las generaciones presentes y la esperanza de las generaciones futuras", complementó.
"Sin duda, va a ser un hito histórico. Por primera vez en nuestra historia, estaremos escribiendo democráticamente, y con amplia participación ciudadana, una nueva Constitución para Chile. Esto representa no solo una gran oportunidad. Sino que, por sobre todo, una gran responsabilidad con Chile, los chilenos de hoy y los chilenos que vendrán", sentenció.
Recordemos que Secretaría General de la Presidencia ratificó que el Presidente Piñera no asistirá a la primera sesión de la Convención. Además, el Gobierno aún no informa quien será el ministro de fe de la ceremonia inaugural.
"Hoy estamos convocando a la primera sesión de instalación de la Convención Constitucional, la que tendrá lugar el domingo 4 de julio del año 2021 a las 10:00 de la mañana, en el edificio del Congreso Nacional, en la ciudad de Santiago".
"Esta Convención Constitucional deberá, en un plazo de nueve meses, prorrogable por tres meses adicionales, redactar y aprobar una nueva Constitución para Chile, la que deberá ser ratificada por la ciudadanía a través de un plebiscito".
"Esta Convención Constitucional representa sin duda una gran oportunidad para lograr esos acuerdos amplios y sólidos que permitan dar origen a una nueva Constitución, que sea conocida y respetada por todos los chilenos, y constituya un gran marco de unidad, estabilidad y proyección hacia el futuro para nuestra Democracia y nuestra sociedad".
"Nace de la reforma constitucional que promulgamos el 24 de diciembre del 2019, luego de la convocatoria que hizo el Gobierno la noche del 12 de noviembre a un acuerdo por la paz y la justicia. Y por una nueva constitución. Y por el acuerdo alcanzado tres días después, por una amplia mayoría de sectores políticos en el Congreso".
"Una amplia mayoría de ciudadanos refrendó esta convocatoria y este acuerdo en el plebiscito del 25 de octubre del año pasado. Y finalmente el 15 y el 16 de mayo de este año, la ciudadanía eligió una Convención Constitucional conformada por 155 miembros, con una equitativa participación de hombres, mujeres, y nuestros pueblos originarios".
"De acuerdo al mandato constitucional que da origen a esta Convención y le otorga sus atribuciones y competencias, ella deberá respetar el carácter de República que tiene el Estado de Chile, su régimen democrático, las sentencias judiciales firmes y ejecutoriadas y los tratados internacionales ratificados y que se encuentran vigentes".
"Adicionalmente, no podrá poner término anticipado al periodo de las autoridades elegidas por votación popular. Por otra parte, tal como lo establece la reforma constitucional que dio origen a esta Convención, no puede atribuirse el ejercicio de la soberanía ni asumir otras atribuciones que no han sido expresamente conferidas. Dentro de este marco fijado por la reforma constitucional, esta Convención tiene importantes grados de autonomía, que todos debemos respetar. Sin embargo, su misión no es gobernar ni legislar, tareas que le corresponden al Gobierno y al Congreso y que seguirán siendo ejercidas".
"El Gobierno, en cumplimiento de ese mismo mandato constitucional, prestará a esta Convención todo el apoyo técnico, financiero y administrativo necesario para su instalación y funcionamiento. La misión de la Convención es respetando siempre nuestra Constitución y nuestro estado de derecho a través del diálogo, la colaboración y la búsqueda de acuerdos, lograr las mayorías de 2/3 necesarias para acordar y proponer una nueva Constitución para Chile".
"Sin duda esta misión va a exigir mucha grandeza, visión, sabiduría y patriotismo. Que la historia, nuestra hermosa historia, recuerde a los convencionales constituyentes como los constructores de los grandes acuerdos y los forjadores de un mejor futuro para Chile y para todos los chilenos".
"Esta Convención Constitucional también representa un llamado a la participación y compromiso de todos los ciudadanos. Para que de esta forma, la ley madre, nuestra Constitución, la ley madre de nuestra democracia, tenga el respeto de todos los chilenos. Es esencial, porque la nueva Constitución debe recoger nuestras tradiciones republicanas y los valores esenciales que viven en el alma de nuestro pueblo. También debe recoger el aporte de las generaciones pasadas, la voluntad de las generaciones presentes y la esperanza de las generaciones futuras".
"Sin duda, va a ser un hito histórico. Por primera vez en nuestra historia, estaremos escribiendo democráticamente, y con amplia participación ciudadana, una nueva Constitución para Chile. Esto representa no solo una gran oportunidad. Sino que, por sobre todo, una gran responsabilidad con Chile, los chilenos de hoy y los chilenos que vendrán".
PURANOTICIA