La idea de la querella es dejar sin efecto el contrato de compra de los terrenos, lo que le costó a Silva $9.500 millones, bajo el argumento del cambio del plan regulador de la municipalidad.
El Juzgado de Garantía de Rancagua decidió declarar admisible la querella de Hugo Silva, empresario dueño de Silca que compró los terrenos en Machalí vendidos por Caval, por delitos de estafa e inducción a la firma de un contrato contra Natalia Compagnon y Mauricio Velero, representantes de la empresa.
La idea de la querella es dejar sin efecto el contrato de compra de los terrenos, lo que le costó a Silva $9.500 millones, bajo el argumento del cambio del plan regulador de la municipalidad.
Ahora la Fiscalía tiene la facultad para pedir declaraciones o investigar posible participación de funcionarios públicos en el polémico negocio.
Pn/gm
Agencia Trayectos.