El equipo compuesto por Nico Hülkenberg, Earl Bamber y Nick Tandy consiguió la victoria en la máxima prueba de resistencia en el automovilismo
Porsche se tomó en serio la edición de 2015 de las 24 Horas de Le Mans y dominaron desde los entrenamientos, en los que se aseguraron las tres primeras posiciones con sus tres prototipos 919 Hybrid. Audi, dueña y señora de la carrera de resistencia más emblemática del mundo del motor, puso sus tres coches inmediatamente por detrás, esperando poner nerviosos a sus rivales, pero éstos supieron aguantar durante veinticuatro horas muy duras, intensas y disputadas.
La aerodinámica permitió que desde muy temprano se distanciaran rápidamente los Porsche y los Audi en el circuito de La Sarthe, y durante la jornada del sábado mantuvieron un ritmo paulatino que los fue distanciando del resto de escuderías. Con grandes especialistas como Lotterer en el Audi 7 y pilotos con hambre como Filipe Albuquerque en el 9, la presión fue constante para los Porsche, coches que muchos esperaban que terminaran cediendo ante el empuje de los Audi R18 e-Tron Quattro. Esto no llegó a suceder.
Las diferencias definitivas comenzaron a forjarse en la mañana del domingo, cuando las visitas a los boxes comenzaron a multiplicarse para Audi, mientras Porsche mantenía su ritmo. El coche pilotado por Nico Hülkenberg, Earl Bamber y Nick Tandy mostró un nivel muy por encima del resto, sólo seguido de cerca por el Porsche 17 de Timo Bernhard, Mark Webber -siempre una gran atracción por su pasado en la Fórmula 1- y Brendon Hartley.
La falta de fisuras en su estrategia obligó a Audi a conformarse con la tercera plaza del podio, que fue para el trío formado por Marcel Fässler, André Lotterer y Benoît Tréluyer. Los tres empujaron a fondo cuando estaban al volante, pero no fue suficiente para dar continuidad a la dictadura impuesta por Audi desde 2000, periodo en el que sólo cedió en dos ocasiones -tres con la de este año-.
Muy por detrás quedó Toyota, escudería que ha dado un paso atrás respecto a su actuación el año pasado en el Mundial de Resistencia. Los experimentales y revolucionarios Nissan sufrieron lo indecible y tan sólo terminó con uno de sus tres prototipos. El español Lucas Ordóñez formó parte del primer abandono en la categoría P1 después de que Tsugio Matsuda no pudiera devolver el coche a boxes tras una salida de pista.
Pn/ms
PURANOTICIA