La patrulla de rescate estuvo con los familiares y amigos de los españoles hasta las 17.30 horas locales (22.30 GMT), en que retornaron a la ciudad de Atalaya
Lima, 27 ene (EFE).- Un tío y amigos de los españoles Javier y Pedro García-Mauricio Soldevilla, que estuvieron entre los pasajeros de una embarcación que naufragó hace diez días en un río de la selva peruana, llegaron hoy a la zona del accidente, que sigue afectada por tormentas, según informó a Efe un portavoz oficial.
La patrulla de rescate estuvo con los familiares y amigos de los españoles hasta las 17.30 horas locales (22.30 GMT), en que retornaron a la ciudad de Atalaya, explicó el comandante Romy Buleje, de la capitanía del puerto de Pucallpa.
El naufragio ocurrió en el río Urubamba cerca a la boca del río Inunya y dejó seis fallecidos, entre los que se encuentra Pedro García Mauricio, además de cuatro desaparecidos, entre los que está Javier.
Los equipos de rescate de la Armada entraron hoy en uno de los compartimentos, llenos de lodo, de la nave para buscar los restos de los desaparecidos, pero sólo encontraron una billetera con los documentos de identidad de peruanos que no figuraban en la lista de pasajeros, indicó Buleje.
La patrulla suspendió sus labores de búsqueda hasta mañana debido a que la tormenta ha incrementado el nivel del río en dos metros de altura, lo que hace la corriente de agua más fuerte y arrastra más palos que dificultan la tarea, según explicó Buleje.
Javier y Pedro García-Mauricio Soldevilla, de 34 y 36 años, respectivamente, estuvieron entre las diez personas reportadas como desaparecidas tras el accidente en el caudaloso río Urubamba, cerca del límite entre las regiones de Cuzco y Ucayali.
Además de encontrar los cuerpos de cinco peruanos, los equipos de rescate hallaron el viernes pasado el cadáver de Pedro, mientras que Javier figura entre las cuatro personas aún desaparecidas.
La madre de los dos españoles, que llegó el domingo a Lima, se encuentra hoy en la ciudad de Pucallpa hasta donde fue trasladado ayer el cadáver de Pedro desde Atalaya, según informaron fuentes oficiales.
La familia de los náufragos españoles consiguió recaudar el fin de semana último unos 10.000 euros (unos 11.200 dólares) para costear la repatriación del cadáver ya recuperado y los gastos de los viajes al lugar del naufragio de la madre de los dos hermanos y de tres amigos, que se encontraban próximos a la zona.
Los equipos de rescate han decidido desguazar la embarcación, para intentar encontrar a los desaparecidos en sus compartimentos, que se encuentran llenos de arena y lodo.
La embarcación transportaba mercancías, según el registro de la capitanía fluvial de Pucallpa, pero recogía pasajeros durante su trayecto, y en el momento del accidente transportaba a dieciséis personas, de las que seis consiguieron salvarse en los primeros instantes del naufragio. EFE
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