Durante meses, el presidente estadounidense minimizó la pandemia y se mostró escéptico sobre su gravedad, pese a que EE.UU. acumula 208.000 fallecidos por Covid-19, la cifra más alta de muertes en el mundo.
Si algo faltaba para que Estados Unidos y su campaña electoral entraran a una fase inédita en su historia moderna, eso acaba de ocurrir: el presidente Donald Trump dio positivo de coronavirus, según anunció él mismo este viernes.
Hasta este momento Trump solo presenta síntomas leves, indicaron funcionarios de la Casa Blanca.
Durante meses, el presidente estadounidense minimizó la pandemia y se mostró escéptico sobre su gravedad, pese a que EE.UU. acumula 208.000 fallecidos por Covid-19, la cifra más alta de muertes en el mundo.
Pero la noticia del positivo de Trump y de su esposa Melania llega en un momento particularmente delicado: solo un mes antes de la elección presidencial en la que el actual mandatario se enfrenta al demócrata Joe Biden.
El candidato demócrata informó este viernes en su cuenta de Twitter que tanto él como su esposa Jill fueron sometidos también a una prueba de Covid-19 y dieron negativo. Trump y Biden coincidieron en el primer debate electoral de cara a las próximas elecciones que se llevó a cabo esta semana.
Una de las grandes cuestiones ahora es cómo afectará la convalecencia de Trump a la campaña electoral.
¿Qué se sabe sobre la salud de Trump?
El médico de Trump, Sean Conley, emitió un comunicado a última hora de este jueves, diciendo que el presidente y la primera dama estaban "bien en este momento y planean quedarse en la Casa Blanca durante su convalecencia".
"Espero que el presidente continúe desempeñando sus funciones sin interrupciones mientras se recupera, y los mantendré informados sobre cualquier desarrollo futuro", agregaba el comunicado. El médico no proporcionó más detalles.
Sin embargo, Trump tendrá que mantenerse aislado al menos por algunos días y tuvo que suspender actividades de campaña.
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Según los expertos, la semana que viene puede ser clave para saber cómo va a evolucionar su salud.
El examen físico más reciente de Trump, realizado a principios de este año, indicó que pesaba 110,7 kg, esto se considera obeso para su altura de 1,9 m.
Pero el doctor Conley dijo en ese momento que el presidente "se mantiene sano".
¿Está en un riesgo particular por su edad?
Para el caso del nuevo coronavirus, la edad es un factor de riesgo claro: a mayor edad, mayor es el peligro de que una infección por coronavirus se convierta en una amenaza para la vida.
Las personas de entre 64 y 74 años con Covid-19 en EE.UU. tienen cinco veces más probabilidades de necesitar atención hospitalaria y 90 veces más probabilidades de morir que alguien de 20 años.
Según los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés), 8 de cada 10 muertes por coronavirus en el país han sido de personas mayores de 65 años.
El virus también parece afectar más a los hombres y a las personas con sobrepeso.
Esto ocurre porque la obesidad provoca un estado de inflamación crónica que afecta al funcionamiento de las células del cuerpo y de sus superficies mucosas, que ven interrumpida su función de barrera protectora natural y facilitan el ataque de virus como el coronavirus.
También tiene efectos negativos sobre el sistema inmune, como la disminución en la producción de proteínas vitales para defender al cuerpo contra posibles infecciones.
Pero ese es el panorama general, un patrón visto en toda la población, y no se puede adelantar cómo evolucionará el presidente estadounidense.
¿Qué va a pasar con la campaña?
Los CDC dicen que una persona debe aislarse durante 10 días después de una prueba positiva.
"Comenzaremos nuestro proceso de cuarentena y recuperación de inmediato. ¡Lo superaremos juntos!", escribió en Twitter Trump al dar la noticia de su positivo.
Para Anthony Zurcher, corresponsal de la BBC para Norteamérica, es difícil decir exactamente cuán trascendental es esto a tan solo 32 días de las elecciones estadounidenses.
Esta ya era una campaña muy particular, sin eventos masivos debido a la pandemia.
El segundo debate presidencial entre Trump y Biden está programado para el 15 de octubre en Miami, Florida, y todavía no está claro cómo afectará el contagio del presidente a su organización.
No obstante, Mica Mosbacher quien forma parte del equipo de asesores de la campaña de Trump, dijo este viernes en el programa Today de la BBC que se sienten "muy optimistas" y no descarta que el debate se pueda hacer de manera virtual.
"Siguiendo los lineamientos de los CDC, (Trump) no podrá asistir a eventos masivos", dijo Mosbacher, "pero es totalmente posible hacer un debate virtual en dos semanas".
"El presidente continuará trabajando desde la Casa Blanca".
También está por verse cómo maneja esto la campaña del mandatario, que según Zurcher tendrá que responder por qué el presidente adoptó una actitud aparentemente tan arrogante hacia la pandemia, y cuántos altos cargos en la Casa Blanca pueden haberse vistos expuestos.
Hace solo dos días, durante el primer debate, Trump menospreció al oponente demócrata Joe Biden por usar con frecuencia mascarillas y no dar mítines de campaña del mismo tamaño que los suyos.
Ahora el hecho de que el presidente haya dado positivo ya puede significar un golpe contundente para su campaña, que parece más comprometida que nunca
Esto mantendrá en el centro de atención un tema que Trump trataba de evitar: cómo respondió él mismo a la pandemia.
Para algunos, que el mandatario ahora esté infectado quizás sea la prueba definitiva de que subestimó los riesgos del Covid-19 y aumentó su impacto en el país.
Pero también es posible que Trump se recupere rápido del virus y logre retomar su campaña.
Algunos votantes hasta podrían sentir mayor empatía por el presidente en este momento de dificultad personal para él.
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¿Bajo qué circunstancias se podrían retrasar las elecciones?
En cualquier caso, el período de cuarentena del presidente Trump tiene un impacto en su capacidad para hacer campaña y por eso otra de las cuestiones que surge es sobre las posibilidades de que la elección se retrase.
Según la ley estadounidense, las elecciones presidenciales se llevan a cabo el martes después del primer lunes de noviembre, cada cuatro años, por lo que este año son el 3 de noviembre.
Cambiar la fecha dependería de los legisladores estadounidenses, no del presidente. Se requeriría una mayoría en ambas cámaras del Congreso -Cámara de Representantes y Senado- para cualquier cambio de fecha.
Eso parece poco probable dado que la Cámara de Representantes está controlada por los demócratas.
Pero incluso aunque se cambiara, la Constitución estadounidense establece que una administración presidencial solo dura cuatro años. Entonces, el mandato del presidente Trump expirará automáticamente al mediodía del 20 de enero de 2021.
¿Qué pasa si Trump cae gravemente enfermo y no puede cumplir con sus deberes?
Por ahora, no se ha informado que el presidente se encuentre mal, y este es un escenario que no anticipan desde la campaña de Trump.
"Es un guerrero y un luchador y no anticipamos en este momento que quedará incapacitado", le dijo Mosbacher a la BBC. "Así que nos sentimos muy optimistas acerca de esta situación".
No obstante, si resulta gravemente enfermo y no puede cumplir con sus deberes, la 25ª enmienda de la Constitución de Estados Unidos establece que el presidente puede entregar el poder a su vicepresidente, lo que significa que Mike Pence se convertiría en presidente interino.
Pence dio negativo en la última prueba que se le realizó, este viernes, según informó su vocero. Una vez recuperado, Trump podría reclamar su posición. Esto sucedió durante los gobiernos de Ronald Reagan y George W. Bush.
Si Pence quedara incapacitado también, bajo la Ley de Sucesión Presidencial Nancy Pelosi, la presidenta de la Cámara de Representantes, una demócrata, sería la siguiente en la fila, aunque los expertos constitucionales dicen que tal transferencia de poder generaría batallas legales.
PURANOTICIA // BBC MUNDO