El geoglifo con forma felina en las Pampas de Nasca, Ica, Perú, había pasado desapercibido por años, debido a la erosión del terreno.
Un felino de unos 37 metros de largo con el cuerpo extendido en la colina de un desierto y que mira de frente a sus observadores parecería difícil de ignorar.
Pero el geoglifo que representa a esta figura en las Pampas de Nasca, Ica, Perú, había pasado desapercibido por años, debido a la erosión del terreno.
Hasta que a inicios de 2020, unos arqueólogos del Ministerio de Cultura detectaron al animal trazado en la arena del desierto de Ica, a unos 400 kilómetros al sur de Lima, muy cerca de otras de las figuras que conforman las famosas "líneas de Nasca". El Ministerio anunció el hallazgo esta semana.
DETECCIÓN
A inicios de 2020, las autoridades peruanas empezaron a mejorar el acceso al mirador que permite a los turistas ver desde tierra parte de las líneas de Nasca.
"El ascenso era complicado y queríamos facilitar un paso más seguro. En ese proceso, nos percatamos que en esa ladera había trazos que no eran de ninguna manera naturales", dijo el arqueólogo Jhonny Isla, responsable del Parque Arqueológico Nasca-Palpa, a la agencia de noticias EFE.
"Desde el Ministerio de Cultura nos dimos cuenta de que el acceso al mirador, de hecho, transcurría sobre un geoglifo, y nos planteamos cambiarlo, pues no es posible que se promoviera el acceso dañando patrimonio", añadió.
El Ministerio de Cultura de Perú dijo en un comunicado este jueves que "la figura apenas era visible y estaba a punto de desaparecer debido a que se localiza en una ladera de pendiente bastante pronunciada y a los efectos de la erosión natural".
A través de fotografías tomadas con drones, fue quedando al descubierto lo que ya "parecía una figura zoomorfa, un felino" —detalla EFE— dibujado con trazos de entre 30 y 40 cm de ancho.
En esta última semana, "se realizó la limpieza y conservación del geoglifo", dijo el Ministerio de Cultura este jueves.
"Llama la atención que todavía se puedan identificar figuras nuevas, pero sabemos que hay otras que se pueden encontrar. El uso de drones, que nos permiten tomar imágenes en laderas de las colinas, lo hace posible", dijo el arqueólogo Isla a EFE.
FELINO PARACAS
La figura recién descubierta habría sido elaborada hace más de 2.000 años (unos 100 o 200 antes de nuestra era) por la cultura Paracas.
"Representaciones de felinos de este tipo son frecuentes en la iconografía de la cerámica y los textiles de la sociedad Paracas", detalló el Ministerio.
Esta civilización es anterior a la sociedad Nasca, que elaboró las famosas líneas y otros geoglifos que en su mayoría pueden verse completos solo desde el aire.
"El significado de los geoglifos de Nazca tiene algo seguro como respuesta: estaban vinculados al agua y la fertilidad. Nada extraño para un pueblo que vivía en un desierto y para el que el agua era central (...) Pero estos [geoglifos] nuevos, más pequeños, entrañan una concepción distinta: están hechos para que la gente los vea", dijo el arqueólogo Isla a EFE.
El experto le dijo a la agencia que las figuras de Nazca fueron hechas "por hombres, para los dioses" y las de Paracas, "de hombres para los hombres".
Las Líneas y Geoglifos de Nasca y Palpa son un conjunto de más de 800 líneas de decenas de metros de largo, unas 300 figuras geométricas y otras 70 con formas de animales, plantas y seres antropomorfos.
Fueron dibujadas durante más de 1.500 años en los desiertos de Ica, por las civilizaciones preincas Nasca y Paracas.
Las figuras pertenecen a la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco desde 1994.
Hasta ahora se desconoce a ciencia cierta la finalidad de los dibujos.
PURANOTICIA // BBC MUNDO