La norteamericana y la alemana dejaron en el camino a Vesnina y Venus Williams, respectivamente, y se encontrarán en el partido definitorio.
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No hubo sorpresas. Serena Williams y Angelique Kerber llegaban a las semis de Wimbledon como claras favoritas para avanzar a la final. Y esa superioridad en los papeles la pudieron plasmar este jueves en la cancha principal, sacándose de encima en sets corridos a sus contrincantes, para citarse así en la gran final el próximo sábado.
Williams, la número uno del mundo y ganadora de seis torneos en La Catedral, no tuvo problemas para despachar a la rusa Elena Vesnina por 6-2 y 6-0 en sólo 50 minutos de juego. Con la victoria, Serena llegó a su novena final en el All England Lawn Tennis and Croquet Club y ahora tendrá la chance de levantar su 22° torneo de Grand Slam de su exitosísima carrera.
Tras los festejos de Serena, saltó a la cancha su hermana Venus en busca de completar la alegría para la familia. Pero la más grande de las Williams no pudo contra la potencia de Angelique Kerber, quien tras una hora y 13 minutos de partido la superó por un doble 6-4 y se dejó la posibilidad de sumar su segundo grande.
