El defensor uruguayo Pablo Álvarez fue presentado oficialmente este miércoles como el tercer y último refuerzo de Universidad Católica para la actual temporada.
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El defensor uruguayo Pablo Álvarez fue presentado oficialmente este miércoles como el tercer y último refuerzo de Universidad Católica para la actual temporada.
El zaguero que viene de defender a Nacional llega al cuadro de la precordillera para ocupar el puesto del lesionado Stefano Magnasco, quien estará cuatro meses fuera de las canchas por una fractura por estrés en la vértebra L5.
En sus primeras palabras como nuevo jugador de la UC, el lateral por derecha indicó que "estoy feliz de llegar a una institución tan importante como Católica. Vengo con mucha ilusión, me han hablado muy bien del club".
El jugador que ocupará en el cuadro de Mario Salas la casaquilla número 8 se definió como "un lateral que me preocupo de la fase defensiva, pero que me gusta ir al ataque, en la parte física llego en el momento justo, por lo que este receso me hará muy bien".
Sobre el conocimiento del balompié nacional, Álvarez señaló que "como uruguayo, tengo muy buenas referencias del fútbol chileno. Carlos Carmona, cuando fuimos compañeros en Reggina, me habló muy bien del club".
La nueva incorporación de los cruzados también se ilusiona con una posible nomina a la selección uruguaya, sobre todo considerando la disputa de la Copa América en el país. "Me motiva e ilusiona ir a la Copa América, creo que si ando bien, puedo regresar", dijo el zaguero que jugó el año 2007 por la 'Celeste'.
Además de Nacional de Montevideo, Álvarez ha defendido las camisetas de la Reggina de Italia, el Wisla Cracovia de Polonia y Panserraikos de Grecia.
AGENCIA UNO
pn/py
