El nuevo técnico de Universidad Católica, Mario Salas, se siente confiado para devolver al equipo el protagonismo que ha perdido con el tiempo y en entrevista con La Tercera habló de todo: de su nuevo desafío, los jugadores jóvenes y la selección de Sampaoli.
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La última vez que los cruzados lograron alzar la copa fue el 2010, bajo el mando del argentino Juan Antonio Pizzi en la banca, pero la ausencia de títulos por cuatro años es algo que al nuevo estratega no presiona. "Antes Católica se complicaba por más años: en 1997 fue campeón y antes lo había sido en 1987. Fue una diferencia de 10 años. Esta cosa de los tiempos a mí no me presiona ni me afecta respecto de los cuatro años que han pasado", señaló.
Eso sí, el 'Comandante' tiene claro que está en un club grande del fútbol chileno, por lo que ser protagonista es una obligación. "Tampoco podemos hacernos los pelotudos, porque estamos llegando a un equipo grande, donde es permanente el objetivo de ser campeón. Lucharemos porque suceda lo más rápidamente posible, pero también queremos armar algo que signifique mantener un buen rendimiento durante mucho tiempo", dijo.
"Las metas parten desde ahora. El objetivo institucional es ser campeones. Ahora debo determinar qué tengo que hacer para lograrlo, cómo tengo que armarlo. Y eso hay que construirlo con este grupo de jugadores, a los que les tengo mucha confianza. La UC ya está posicionada entre los grandes y por qué no ser el mejor", agregó.
Sobre los jugadores que conforman el club, Salas sabe que la incorporación de gente joven es importante para mantener la intensidad que se busca. Sin embargo, en el equipo juegan los que muestran un mejor nivel y explicó que "la gente y la institución tienen que entender que juega quien está mejor y eso va más allá de la edad. Sí es necesario contar con gente joven que tenga identidad y arraigo con la institución. También nos interesa mucho contar con gente joven, porque nuestro juego tiene una intensidad en la cual los jóvenes, de alguna forma, encajan mejor".
Además aprovechó de recordar su buena presentación con Huachipato en la Copa Sudamericana el año pasado, donde los jugadores jóvenes como el mediocampista Martín Rodríguez y el defensa Brayan Véjar fueron protagonistas. "En el fondo es el rendimiento. Si el juvenil anda bien, jugará. Nosotros en Huachipato participamos a nivel internacional con tres o cuatros juveniles, pero nadie les regaló nada a ellos", comentó al matutino.
En tanto, Salas también tuvo palabras respecto a la escasa cantidad de nombres que se pueden sumar al plantel para disputar el Clausura. "Vemos el asunto de los tres refuerzos como un desafío, no sólo para nosotros, sino que para toda la institución, los dirigentes, la administración. Hay una gran función que tenemos que cumplir tanto cuerpo técnico como gerencia técnica", apuntó.
Consultado por su paso en la 'Roja' Sub 20, el estratega recordó su polémica salida y explicó que "la doy por superada. Soy una persona que no olvida, pero no soy rencoroso. No puedo seguir pegado en cosas que no me hacen bien".
Y si bien aseguró que no sigue los partidos de la 'Rojita', analizó el presente de los ahora dirigidos por Hugo Tocalli. "En lo macro, ha estado trabajando muy bien. Hay apoyo institucional. Eso es lo que uno puede hablar desde afuera. Me parece un acierto el haber traído a Hugo como jefe de divisiones menores y lo mismo con los demás técnicos. Me da la impresión de que se están manejando por políticas deportivas, que pueden significar una fuerte base de desarrollo", señaló.
Finalmente, se refirió a la selección adulta y comparte la decisión de Jorge Sampaoli sobre la no nominación de los delanteros Ángelo Henríquez y Nicolás Castillo, pese a sus buenos rendimientos. "El otro día escuchaba a Jorge Sampaoli y me encantó lo que dijo, en cuanto a que la selección adulta no es un club: juega el que está mejor. En algún momento Angelo y Nicolás van a estar, pero tal vez el técnico piensa que Sánchez y Vargas lo han hecho mejor, aunque tampoco cita a muchos en esos puestos", cerró.
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Pn/gm
Texto: Agencia Uno.
