El martes la tensa situación entre los directivos loínos terminó con la amenaza de renuncia del presidente Augusto González, quien este miércoles dio pie atrás y anunció su continuidad.
El técnico de Cobreloa, Marco Antonio Figueroa, no dudó en asegurar que "tendré que dar un paso al costado" si los problemas entre dirigentes continúan en el cuadro de Calama.
El martes la tensa situación entre los directivos loínos terminó con la amenaza de renuncia del presidente Augusto González, quien este miércoles dio pie atrás y anunció su continuidad.
El tema es que el 'Fantasma' Figueroa se declaró molesto por la interna del club naranja y, tras la victoria 3-0 sobre Palestino, amenazó que "si las cosas no se arreglan dentro de la institución, tendré que dar un paso al costado".
"La Comisión de Fútbol sabe que yo lo que digo lo cumplo. Hoy tenían que estar los tres jugadores (refuerzos), pero hay una persona que no quiere que lleguen, ha puesto problemas. Me cuesta creer cómo la gente le puede poner problema al equipo. Lo que más les pedí a los dirigentes fue unidad, yo no quiero lo que pasó antes", añadió en relación a su anterior ciclo.
En lo futbolístico, Figueroa se mostró crítico pese a la superioridad en el marcador sobre los 'tricolores': "Me hubiese gustado ganar jugando un poquito mejor, pero había mucho nerviosismo y ansiedad. Los muchachos hicieron un esfuerzo bárbaro y eso que sólo tuvimos a (Ricardo) Martínez como refuerzo".
"Vamos a tratar de que el equipo tenga equipo equilibrio, hoy corrimos más de la cuenta. Cobreloa va a jugar de local o visita parecido, podemos cambiar el esquema, pero la presión la vamos a tener siempre", sentenció.
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