
Messi abrió el marcador, gracias a una genial asistencia de Rakitic.
FC Barcelona, con el arquero chileno Claudio Bravo en el banco, igualó este miércoles a un gol ante el Bayer Leverkusen en el BayArena, en el sexto y último partido de ambos en la fase de grupos de la Liga de Campeones, con lo que los blaugrana y la AS Roma serán por este orden los integrantes de este grupo que acudan a los octavos de final.
El equipo donde milita el volante nacional Charles Aránguiz., hoy en recuperación del tendón de Aquiles, no sentenció a un Barça apático incapaz de crear su juego. Las varias rotaciones, por sanción, lesión o simplemente porque Luis Enrique quiso dar descanso a algunos de sus hombres con más minutos, propiciaron que el cuadro culé no encontrara el dominio ni a través del balón ni mediante posibles contras, y el gran partido de Marc-André Ter Stegen fue lo único que evitó que salieran derrotados de suelo alemán.
Sin duda, el equipo germano se jugaba mucho más y salió a morder, dispuesto a ganar y más aprovechando que en el Barça había jugadores suplentes e, incluso, jugadores del filial que debutaban o bien en 'Champions' o bien incluso hasta con el primer equipo. Dispuso de más y mejores ocasiones de gol, pero Ter Stegen fue un auténtico muro y una pesadilla para Bellarabi, Mehmedi, Çalhanoglu y también para el 'Chicharito' Hernández, el único capaz de batirle aunque vio cómo le sacaba un mano a mano al final del partido que era el 2-1.
En el Bayer creerán que podrían haber ganado, pues tuvieron ocasiones para ello. El pase a octavos sobrevoló en varias ocasiones el cielo de Leverkusen pero tanto el guardameta blaugrana como el mal acierto local en las acciones claves les impidieron seguir siendo equipo de esta Liga de Campeones. Se irán a la Europa League, mientras que el Barça será cabeza de serie y la Roma, pese a no ganar, serán segundos y estarán en el segundo bombo del sorteo.
Messi abrió el marcador, gracias a una genial asistencia de Rakitic. El croata visionó un gran pase para Messi, a su derecha, cuando parecía que tenía pases más fáciles. La paciencia y habilidad de Rakitic la culminó en gol el argentino, que hizo una diagonal para recoger el balón, encaró a un Leno al que superó con un cambio de ritmo y autopase con la izquierda para marcar con su derecha.
Al final, empate que deja mejor sabor al Barça, muy amargo a un Bayer que sabrá que tuvo el billete en sus manos y lo dejó escapar.
AGENCIA UNO /EUROPA PRESS