Las repercusiones tras los desordenes realizados por hinchas de la "U" en Talca vivió este viernes su jornada más algida. Dos partidos se suspendieron y la ANFP pidió el regreso de Carabineros a los estadios. Autoridades y la fuerza pública, no comparten la solicitud.
Por Matías Seccatore
Este viernes continuaron las repercusiones tras los incidentes vividos este jueves en el duelo entre Rangers y Universidad de Chile, en el estadio Fiscal de Talca. Temprano en la mañana, la intendencia del Maule presentó una querella contra quienes resulten responsables por los violentos incidentes que obligaron a suspender el partido de Copa Chile entre pidocanos y universitarios, que ganaban 2-0 los azules.
La acción fue interpuesta por el intendente Hugo Veloso, quien llegó durante la mañana con los primeros antecedentes tras la batalla campal que protagonizaron hinchas de ambas escuadras. Es que los daños al reducto maulino serían de unos 15 millones de pesos, de los cuales ocho correspondería a los asientos destruidos por los forofos del conjunto estudiantil.
En prisión preventiva quedaron dos de los siete hinchas detenidos en durante los violentos incidentes que obligaron a la suspensión del partido entre. En total, los detenidos fueron 20, pero sólo los 7 detenidos al interior del recinto deportivo fueron formalizados este viernes en el Juzgado de Garantía de Talca por la Ley de Violencia en los Estadios. Los otros 13 quedaron en libertad.
Los dos imputados que quedaron en prisión preventiva tenían condenas, uno por robo con violencia y otro por agresión a carabinero, y esto fue tomado en cuenta por el tribunal para dictar la privación de libertad.
Otros cuatro quedaron sujetos a las medidas cautelares de arraigo nacional, firma quincenal y prohibición de ingresar a todos los estadios del país. El séptimo detenido fue dejado en total libertad, debido a que el tribunal cuestionó el parte de su detención.
Según se pudo apreciar en la audiencia de formalización, los siete imputados son hinchas del club deportivo Universidad de Chile.
A mediodía, el presidente de al ANFP, Sergio Jadue manifestó su total rechazo al actuar de un grupo de barristas. "Como fútbol estamos indignados con los nuevos hechos. El fútbol chileno ha demostrado que puede organizar grandes eventos. Hemos realizado enormes esfuerzos por acabar con estos hechos, que vuelvan las familias a los estadios", expresó el timonel del ente rector del balompié nacional en conferencia de prensa.
"Señores, no los queremos más en el estadio. Los perseguiremos hasta erradicarlos. Seguiremos colaborando con Carabineros", enfatizó el calerano.
Además, el mandamás del organismo anunció que el directorio propondrá algunas medidas como la creación de un registro nacional de hinchas, modificar las bases para que los clubes decidan si desean jugar con público visitante, y que pedirá al Gobierno que Carabineros vuelva a los recintos deportivos del país.
Por su parte, el Gobierno respaldó la labor que ha ejercido el jefe del Plan Estadio Seguro, José Roa, luego de que la oposición pidiera su salida por los hechos de violencia ocurridos ayer en el Estadio Fiscal de Talca y el pasado 12 de julio en el Estadio Sausalito en Viña del Mar.
"José Roa ha hecho un excelente trabajo. Ustedes vieron que en hechos de enorme significación para el país en términos de despliegue operativo y de seguridad, como la Copa América, los incidentes prácticamente fueron menores y, por lo tanto, nosotros respaldamos la labor que está cumpliendo José Roa a cargo del Plan Estadio Seguro", señaló el ministro Secretario General de Gobierno, Marcelo Díaz.
Con respecto a la propuesta que realizó el presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), Sergio Jadue, quien anunció que le solicitará al Gobierno que Carabineros vuelva a los estadios, el vocero aseguró que "vamos a estar siempre abiertos a discutir propuestas, ideas, sugerencias, iniciativas que contribuyan a erradicar la violencia de los estadios".
Ya en horas de la tarde, las autoridades de gobierno, decidieron suspender los partidos Rangers-Curicó Unido y Coquimbo Unido-La Serena. Esto debido a que no existían las garantías para que ambos encuentros se llevarán con normalidad y dar seguridad a los espectadores.
Por su parte, el intendente metropolitano subrogante, David Morales, desechó la idea de aumentar la dotación de carabineros dentro del estadio luego de que el presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), Sergio Jadue, anunciara que le va a solicitar al Gobierno que los uniformados vuelvan a los estadios.
"No podemos pedirle a Carabineros que cumpla el rol que no cumplen las sociedades anónimas deportivas y tampoco podemos pedirle más porque los carabineros no caen del cielo, no vienen de Marte, son los mismos carabineros. Si tenemos que llevar más carabineros a los estadios dejamos las comunas desprovistas de vigilancia y creo que eso no es justo, menos cuando se trata de una actividad lucrativa y privada", afirmó la autoridad regional.
Actualmente, Carabineros interviene cuando ocurren hechos de violencia. Sin embargo, a juicio de Jadue deben permanecer antes de que ocurran los incidentes.
Al respecto, el general Christian Fuenzalida, jefe de Zona Metropolitana de Carabineros, aseguró que "hoy día la realidad de los hechos es que los guardias que están interviniendo en los estadios no son idóneos para esa función".
A su vez, el director de Seguridad Privada y Control de Armas de Carabineros, general Christian Fuenzalida, se mostró contrario al pedido del timonel de ANFP, Sergio Jadue, en cuanto a volver a los estadios a resguardar la seguridad.
El representante de la institución uniformada enfatizó que la policía debe estar preocupada de la seguridad ciudadana y no de un evento que es gestionado por "privados" como lo son los clubes.
"Vemos a diario las necesidades: cómo la gente clama por mayor presencia de Carabineros en las poblaciones, en los barrios y no en un recinto deportivo que tiene un evento privado", aseguró tras una reunión en la Intendencia Metropolitana.
Fuenzalida, de hecho, criticó duramente a la ANFP y a los clubes. "Estamos viendo que, lamentablemente, los principales perjudicados son nuestros carabineros que resultan lesionados y agredidos nada más que porque no se ha cumplido una norma como corresponde", dijo.
En tanto, el jefe de Estadio seguro, José Roa, explicó que no se autorizaron los partidos Rangers-Curicó y Coquimbo-La Serena, recalcando que se está actuando dentro del marco de la ley para prevenir nuevos incidentes, como los que ocurrieron en Everton-Wanderers y, en especial, Rangers-U. de Chile.
"La autoridad suspendió porque las condiciones de seguridad no existen. No se van a autorizar los partidos que no reúnan las condiciones básicas, de tal manera que los dos partidos que se han suspendido es parte de una política permanente. La organización de los partidos debe otorgar garantías, si las garantías no existen no serán autorizados los partidos", aseguró en rueda de prensa en el Palacio La Moneda.
Roa agregó que "la ley entrega herramientas y se están ejerciendo. Lo que nos interesa es que organizadores otorguen garantías suficientes. Sólo puede haber mejoras si hay compromisos de todos los actores".
De paso, el representante de Gobierno también aclaró el rol de Carabineros en los recintos deportivos. "Carabineros no se ha ido ni se irá de los estadios, por cada partido hay más carabineros que guardias. Pero no pueden asumir roles propios de sociedades anónimas deportivas. De hecho, hay un trabajo para profesionalizar guardias", respondió.
En cuanto a la autocrítica por los duros cuestionamientos al Plan, Roa prefirió enfocarse en las soluciones. "Estadio Seguro es un espacio de coordinación de la comunidad del fútbol, es necesario sumar a más actores y se requiere responsabilidad en la solución de todos. No es sensato escuchar declaraciones donde se tiran la pelota unos a otros. Hay que asumir responsabilidades", dijo.
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PURANOTICIA