La partida Ministerio de Educación fue respaldada por 15 a favor y 7 en contra. Sin embargo, el capítulo de los SLEP fue rechazado por 8 votos a favor y 14 en contra.
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La Comisión Mixta de Presupuestos despachó la partida del Ministerio de Educación, pero rechazó el capítulo de los Servicios Locales de Educación (SLEP), marcados por la polémica en la región de Atacama.
El informe fue presentado por el senador José Miguel Insulza (PS), quien dijo que existe “preocupación por la situación general de la educación del país”, y aclaró que “la no aprobación de los Servicios Locales de Educación Pública fue porque hay una controversia que va desde si vale la pena mantener el sistema o mejorarlo”.
Con todo, la partida Ministerio de Educación fue respaldada por 15 a favor y 7 en contra. Sin embargo, se rechazó por 9 votos a favor y 13 en contra el programa de la Subsecretaría de Educación y el capítulo Dirección de Educación Pública. En tanto, el capítulo de los SLEP fue rechazado por 8 votos a favor y 14 en contra.
Pese a que se hizo un esfuerzo por consensuar un protocolo de acuerdo, el que fue presentado por el ministro Nicolás Cataldo, diversos parlamentarios afirmaron que estaba "muy por debajo de lo que se requiere para enfrentar esta crisis (…) Hay que seguir trabajando por medidas más concretas”.
El titular de Educación propuso una “hoja de ruta” para abordar el cambio en la estrategia de educación pública, con medidas para flexibilizar y la disponibilidad de recursos de SLEP con el fin de mejorar su funcionamiento, y la incorporación de una glosa de probidad y transparencia.
Además, planteó la presentación de dos proyectos de ley con medidas urgentes para financiamiento municipal y ajustes de la nueva educación pública, y un trabajo junto con parlamentarios para ir precisando los contenidos y temporalidades para nueva educación pública, el funcionamiento y crisis del financiamiento del sector público y municipal. Sin embargo, su propuesta fue rechazada.
Cataldo reconoció “una crisis que lleva tiempo y con distintas dimensiones”, pero enfatizó que tienen “alturas de miras para enfrentar desafíos (…) Nunca hemos eludido la necesidad de mejorar la ley y las reglas de gestión de los servicios locales”.
En este sentido, sostuvo que los procesos de transición “pueden tener mejoras de implementación”, pero descartó el fin de los SLEP, porque “Chile no cuenta con un sistema alternativo que nos dé más garantías de mejores resultados y evitar crisis”.
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