Además de la captura de los siete imputados, todos de nacionalidad chilena, se logró incautar 306 kilos y 169 gramos de pasta base de cocaína que era trasladada desde Colchane.
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Una banda criminal dedicada al tráfico de drogas, proveniente del norte del país, fue desbaratada en el marco de un procedimiento llamado «Operación Convoy del Desierto».
En el operativo, se logró a detener a siete miembros de esta organización criminal que tenía un sistema de monitoreo y hacía uso de elementos tecnológicos, como drones, cámaras nocturnas y radios, con el objetivo de evadir la fiscalización y los controles policiales a través de la carretera.
Además de la captura de los siete imputados, todos de nacionalidad chilena, se logró incautar 306 kilos y 169 gramos de pasta base de cocaína que era trasladada desde la localidad de Colchane, región de Tarapacá, teniendo como destino la región Metropolitana. La sustancia ilícita era, presumiblemente, ingresada al país desde Bolivia para ser distribuida a otras organizaciones más pequeñas para su comercialización.
Además de los imputados se incautaron una camioneta y dos tractocamiones, uno de los cuales traía la droga oculta en la cabina, bajo la cama del conductor, y el otro vehículo pesado que servía de punta de lanza en caso de detectar presencia policial.
El director nacional de Orden y Seguridad de Carabineros, general inspector Enrique Monrás, recordó que “más de 21 toneladas de droga lleva decomisada Carabineros durante el año, se han desarticulado más de 174 bandas y se han detenido a más de 3.000 personas solamente por temas de droga”.
Mientras que el director de Control de Drogas e Investigación Criminal, general Alex Chaván, detalló que “esta organización trataba de transportar a la región Metropolitana, a través de sistemas modernos, una cantidad de más de 300 kilos de pasta base de cocaína pura. Lo importante de esto era que lo hacía a través de un sistema de televigilancia, utilizando sistemas como radios y drones, los cuales lo iban utilizando a medida que se iban acercando a todos los sistemas de control secundario existentes en las carreteras”.
Aclaró que de esta forma se logró sacar del mercado más de 1 millón 800 dosis de droga, las que fueron avaluadas en 18.000 millones de pesos.
En tanto, el fiscal jefe de San Antonio, Osvaldo Ossandón, indicó que “empezamos a monitorear a este equipo que venía desde los pasos fronterizos del norte por la carretera y nos llamaba la atención que mantenía un sistema de vigilancia para poder ir avanzando sin tener controles. Eso implica una coordinación importante para efecto de que no se cruce con otras investigaciones, que no haya algún aviso, y finalmente fueron interceptadas siete personas que pasaron a control de detención el día sábado y quedaron todas en prisión preventiva”.
PURANOTICIA
