Al menos faltan cerca de 600 mil unidades habitacionales para poder dar cobertura a la demanda actual.
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Un problema crítico es el que deberá afrontar el próximo ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, a efectos de revertir el severo déficit de viviendas que afecta a nuestro país. Según expertos, faltan alrededor de 600 mil unidades para dar cobertura, entre otros, a las más de 80 mil familias que aguardan una solución habitacional.
Diversas personas vinculadas al estudio de esta materia recalcaron que el problema que deberá enfrentar Carlos Montes ya reviste carácter de crisis, ello en vista de la proliferación de campamentos producto de la pandemia, particularmente en regiones como la Metropolitana, Valparaíso, Arica y Parinacota y La Araucanía
Estos asentamientos irregulares, según algunos cálculos de entidades públicas y privadas, llegarían al millar. Santiago Castillo, dirigente del comité de vivienda “Luchadores de Lo Hermida”, señaló que el problema es multicausal y de compleja resolución dadas las escasas herramientas con que cuenta el Estado en un marco de subsidiariedad constitucional.
Así las cosas, Montes tendrá que mentalizarse “en el importante aumento de tomas de tierras, viendo la posibilidad de erradicar estos campamentos, pero también fomentar nuevos programas de autoconstrucción asistida, modernizar tecnológicamente estos asentamientos o al menos brindarle el equipamiento comunitario y el acceso a servicios básicos que se requieren y que forman parte de los derechos humanos de todas las personas. Es un desafío inmenso”, señaló Castillo en radio ADN.
La falta de viviendas se explica por el alto valor del suelo y la falta de terrenos fiscales en lugares integrados a la ciudad, así como los bajos sueldos y un shock migratorio que ha encarecido el costo de la vivienda, incluso bajo la modalidad de arriendo.
El arquitecto y expresidente del Consejo Nacional de Desarrollo Urbano, Luis Bresciani, sostuvo, a efectos de dimensionar la gravedad de la crisis, que “el nuevo ministro (…), quien es una de las personas mas competentes en la materia, no sólo se enfrenta a la crisis de los sin casa o los sin ciudad; se enfrenta también al debilitamiento de la efectividad de las políticas habitacionales y urbanas”.
“Él (Carlos Montes) no sólo tiene el mandato presidencial de tomar medidas urgentes para incrementar el acceso al suelo urbano, la regeneración participativa de barrios y campamentos, y la producción de viviendas de calidad, sino que tendrá que liderar el necesario proceso de reformulación de políticas para recuperar el rol del estado y las comunidades en el desarrollo sostenible de las ciudades”, concluyó Bresciani.
PURANOTICIA
