Una persona murió en la región sureña de Odesa cuando un almacén fue bombardeado, informó la Cruz Roja de Ucrania.
Las sirenas de ataque aéreo sonaron de nuevo en toda Ucrania tras la nueva ofensiva de Rusia con drones y misiles.
En la capital Kiev, cinco personas resultaron heridas en la noche del domingo al lunes en el "mayor" ataque con drones kamikaze hasta el momento, según describió el alcalde, Vitaliy Klitschko.
Una persona murió en la región sureña de Odesa cuando un almacén fue bombardeado, informó la Cruz Roja de Ucrania.
La cuarta ofensiva sobre Kiev en ocho días llegó 24 horas antes de que Rusia celebre el Día de la Victoria.
Este feriado conmemora el triunfo de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi durante la II Guerra Mundial, un conflicto que el Kremlin ha tratado de equiparar, sin demasiado fundamento, a la invasión a Ucrania que inició el año pasado.
Tras una pausa en sus ofensivas contra objetivos civiles en los últimos meses, cuando llegaron a pasar días sin un solo ataque a Kiev, Moscú intensificó sus acometidas aéreas durante la última semana, antes de una altamente esperada contraofensiva ucraniana.
El ejército ucraniano afirmó que en los últimos bombardeos rusos, que se prolongaban por más de cuatro horas poco después de la medianoche, drones kamikaze Shahed de fabricación iraní sobrevolaban todo el país.
El alcalde de Kiev aseguró que Rusia lanzó casi 60 drones en las últimas horas.
Agregó que 36 drones fueron destruidos sobre la capital y 5 personas resultaron heridas por la caída de los restos de estos aparatos tras ser derribados.
La BBC no ha podido verificar estos datos.
Los servicios de emergencia se movilizaron tras caer los restos de un dron sobre una pista del aeropuerto internacional de Zhuliany, una de las dos terminales comerciales de la ciudad, indicó la administración militar de Kiev.
Los civiles resultaron heridos, especificó la institución, cuando fragmentos de los drones impactaron en un edificio residencial del distrito central de Shevchenkivskyi.