
El comunicado es firmado entre otras organizaciones por Oxfam, Save the Children, Médicos Sin Fronteras y Amnistía Internacional.
Más de 170 organizaciones no gubernamentales que operan en Gaza emitieron un comunicado conjunto pidiendo el fin de la polémica organización respaldada por Israel y Estados Unidos para distribuir alimentos en el territorio palestino.
En una declaración titulada "Hambruna o disparos: esto no es una respuesta humanitaria", las ONGs exigen "acciones inmediatas para poner fin al letal programa de distribución israelí (incluida la llamada Fundación Humanitaria de Gaza), restablecer los mecanismos de coordinación de ayuda liderados por Naciones Unidas y levantar el bloqueo del gobierno israelí a la ayuda humanitaria y los suministros".
El comunicado es firmado entre otras organizaciones por Oxfam, Save the Children, Médicos Sin Fronteras y Amnistía Internacional.
La Fundación Humanitaria de Gaza (FHG) comenzó a operar a fines de mayo. Desde entonces, en menos de cuatro semanas más de 500 palestinos murieron y casi 4.000 resultaron heridos cuando intentaban acceder a alimentos, señala el comunicado.
Indica que entre las víctimas mortales se encuentran niños huérfanos y sus cuidadores y agrega que en más de la mitad de los ataques contra civiles en estos lugares hubo niños heridos.
Se estima que hay unos 20 mil niños huérfanos en Gaza, según señaló Oxfam a BBC Mundo.
El comunicado afirma que "con el sistema sanitario de Gaza en ruinas, muchos de los heridos se desangran solos, fuera del alcance de las ambulancias y privados de atención médica vital".
Los 400 puntos de distribución de ayuda que funcionaron durante el alto el fuego temporal en Gaza fueron reemplazados en el nuevo sistema respaldado por Israel y Estados Unidos por solo cuatro puntos de distribución controlados por el ejército israelí: tres en el extremo suroeste de Gaza y uno en el centro del territorio.
El comunicado denuncia que las fuerzas israelíes y y grupos armados, algunos de los cuales operan con el respaldo de las autoridades israelíes según informes, "abren fuego en forma rutinaria contra civiles desesperados que arriesgan todo con tal de sobrevivir".
Israel niega que sus soldados disparen deliberadamente contra civiles y afirma que la FHG proporciona asistencia directa a personas que la necesitan eludiendo la interferencia de Hamás.
El ejército israelí declaró que está investigando informes sobre civiles heridos cerca de los centros de distribución de ayuda de la FHG.
En respuesta a las críticas, un portavoz de GHF declaró: "Hemos entregado más de 52 millones de comidas en tan solo cinco semanas. No son temas de debate ni titulares de prensa, sino alimentos que llegan a las familias palestinas todos los días. Mientras tanto, otras organizaciones se quedan impotentes mientras su ayuda es saqueada. Les hemos ofrecido ayuda para entregarla de forma segura. Se han negado".
"La comunidad humanitaria debe volver a su misión principal: alimentar a la gente, no a proteger sistemas obsoletos ni a eludir la incomodidad del cambio", agregó.
El comunicado denuncia que hoy en día los palestinos de Gaza enfrentan una disyuntiva imposible: morir de hambre o arriesgar la vida intentando en forma desesperada obtener algo de comida para sus familias.
"Esta es ayuda a la que las personas tienen derecho legalmente, una ayuda que se les ha negado sistemáticamente. Esto constituye un flagrante y escandaloso desprecio por el derecho internacional humanitario", dijo a BBC Mundo Rachael Cummings, directora de asuntos humanitarios para Gaza de Save the Children.
"De acuerdo a informes las fuerzas israelíes han impedido que las ambulancias lleguen a los lugares de los ataques para evaluar y tratar a los heridos", agregó Cummings.
Según un reciente informe del periódico israelí Haaretz, soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) relataron en forma anónima que recibieron órdenes de disparar contra civiles desarmados cerca de los centros de distribución de ayuda para ahuyentarlos o dispersarlos.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, rechazó rotundamente el informe y calificó las acusaciones de "falsedades maliciosas".
El ejército israelí también negó las acusaciones de disparar deliberadamente contra palestinos que esperaban recoger ayuda humanitaria.
En un comunicado emitido el lunes, las FDI informaron que estaban reorganizando el acceso a los sitios, lo que incluiría nuevas vallas y señalización, incluyendo señales direccionales y de advertencia, para mejorar la respuesta operativa.
En respuesta al artículo de Haaretz, la FHG afirmó que "no se han producido incidentes ni víctimas mortales en ninguno de nuestros sitios de distribución ni en sus inmediaciones".
Desde que la Fundación Humanitaria de Gaza comenzó a operar en el territorio se han recibido informes casi diarios de fuerzas israelíes que matan a personas buscando ayuda en los puntos de distribución, según relatos de médicos, testigos presenciales y del Ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamás.
Bushra Khalidi, responsable de políticas de Oxfam en los territorios palestinos, dijo a BBC Mundo que los puntos de distribución de ayuda controlados por militares israelíes "se han convertido en escenarios de masacres".
"Lo que estamos viendo son hordas de personas que son confinadas en zonas militarizadas solo para conseguir comida. La ayuda se está utilizando como arma, como herramienta para acorralar a la gente en estas zonas con vallas y crear un caos absoluto".
Khalidi señaló que la gente acude a los puntos de distribución por total desesperación.
"Tengo a mi cuñado en Gaza y le pregunté si había intentado ir a esos puntos de distribución. Me respondió: 'No, no quiero morir'. Así es como lo gente ve esos centros en Gaza. La gente va allí por desesperación absoluta porque no les queda nada. Toda la población está al borde de la hambruna".
"Además, reducir la ayuda humanitaria a alimentos es un insulto. ¿Qué hay de los suministros médicos? ¿Y del agua potable? ¿Y de los materiales para los refugios? ¿Y del combustible que alimenta los hospitales, el agua potable y el saneamiento en Gaza? ¿Qué hay de la nutrición especializada para una población que ha sufrido condiciones casi de hambruna en los últimos cuatro o cinco meses?", agrega.
En el sistema anterior que operó durante el cese el fuego, la ONU y otras oganizaciones humanitarias enviaban mensajes de texto a los civiles para informar de la entrega de ayuda en uno de los 400 puntos de distribución a una hora determinada, afirmó Khalidi. "Nosotros creemos y respetamos la dignidad del pueblo palestino", agregó.
Oxfam y las otras ONGs señalan que debido al hambre extrema, muchas familias están demasiado débiles para competir por las raciones de comida.
"Quienes logran obtener comida a menudo regresan con solo unos pocos artículos básicos, casi imposibles de preparar sin agua potable ni combustible para cocinar", afirma el comunicado.
"Las familias se refugian bajo lonas de plástico, operando cocinas improvisadas entre los escombros, sin combustible, agua potable, saneamiento ni electricidad".
Khalidi relató a BBC Mundo que las familias palestinas en Gaza enfrentan el dilema de decidir a quién envían a los puntos de ayuda.
"La gente mira a sus familias y ve quién tiene la fuerza física para ir a estos centros de distribución. ¿Abandonará una madre a sus cuatro hijos y se arriesgará a morir y a que todos sus hijos queden huérfanos? Tal vez la madre está demasiado enferma, o esté herida o embarazada. Y entonces envía a su hijo mayor", dijo la representante de Oxfam.
Rachael Cummings relató a BBC Mundo que un trabajador de Save the Children en Gaza señaló que su vecino, padre de cuatro hijos, no tuvo más remedio que acudir a un punto de distribución, ya que su familia se había quedado sin comida ni dinero.
"Fue a Rafah y lo mataron a tiros. Nuestro colega ahora intenta ayudar a la viuda de su vecino; dice que está desamparada y traumatizada y sus hijos lloran constantemente".
El comunicado señala que el mecanismo de distribución de ayuda actual que respaldan Israel y EE.UU. está diseñado "para mantener un ciclo de desesperación, peligro y muerte".
"Durante 20 meses, más de dos millones de personas han sido sometidas a bombardeos incesantes, el uso de alimentos, agua y otras ayudas como arma de guerra, desplazamientos forzados repetidos y una deshumanización sistemática, todo ello bajo la mirada de la comunidad internacional", afirma el comunicado.
Rachael Cummings señaló que "durante más de un año niños en Gaza han estado muriendo de hambre y enfermedades, mientras que la ayuda está paralizada al otro lado de la frontera. Se los está haciendo morir de hambre en forma deliberada".
"Estas muertes son totalmente evitables. Y para quienes aún luchan por sobrevivir el tiempo se agota rápidamente".
Las ONGs urgen en su comunicado a los Estados del mundo a cumplir con sus obligaciones según el derecho internacional y garantizar que haya una "rendición de cuentas por las graves violaciones del derecho internacional".
Bushra Khalidi señaló a BBC Mundo que ya en enero de 2024 un grupo de 250 organizaciones humanitarias y de derechos humanos pidió que se detuviera la venta de armas letales a Israel.
"Pedimos que se detuviera la venta de estas armas porque, de hecho, si dejan de vender armar a Israel, no morirá más gente. No matarán a civiles palestinos con total impunidad, no habrá cero rendición de cuentas por la matanza indiscriminada de tantos civiles palestinos inocentes en Gaza".
"Cuanto más se permitan estas atrocidades cometidas por las fuerzas israelíes sin control, más se verá cómo se alimenta la impunidad. Y esto es lo que hemos visto: masacre tras masacre sin ninguna rendición de cuentas", agregó la representante de Oxfam.
"La Unión Europea sigue comerciando con Israel como si no pasara nada. Los gobiernos tienen herramientas a su disposición que prefieren no aplicar para detener esto y obligar a Israel a detener estas atrocidades ahora", apunta.
Las FDI lanzaron una campaña militar en Gaza en respuesta al ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, en el que murieron unas 1200 personas y otras 251 fueron tomadas como rehenes.
Al menos 56.647 personas han muerto en Gaza desde entonces, según el Ministerio de Salud del territorio.
(Imagen: Getty Images)
PURANOTICIA // BBC MUNDO