El comité científico que asesora al gabinete de crisis incluso duda de que el magma, que este miércoles se desplazaba a apenas 4 metros por hora, llegue a desembocar en el mar.
El pueblo de Todoque, en la isla La Palma, en las Canarias (España), es testigo desde el domingo de una erupción volcánica cuya lava avanza destruyendo las casas y que obligó a evacuar a sus 1.200 residentes.
Y no son los únicos. En total unas 6.000 personas de la isla debieron abandonar sus hogares ante el avance, aunque lento, del magma del volcán Cumbre Vieja.
Se trata de una fase eruptiva de relativa estabilidad que los expertos ignoran cuánto tiempo se prolongará.
El comité científico que asesora al gabinete de crisis incluso duda de que el magma, que este miércoles se desplazaba a apenas 4 metros por hora, llegue a desembocar en el mar.
Si esto último sucede, las autoridades locales advirtieron que el contacto de la lava con el agua de mar podría desencadenar una reacción química que provoque explosiones y la liberación de gases tóxicos.
Conforme a las últimas estimaciones, la superficie afectada por la lava abarca 140,44 hectáreas, con un frente de 600 metros.
PURANOTICIA // BBC MUNDO