
El Ministerio de Comercio de China indicó que los aranceles adicionales de EE.UU. generarían más "contramedidas" contra los productos estadounidenses.
China declaró que se mantendrá firme frente a las nuevas amenazas del presidente Donald Trump de imponer aranceles adicionales de 50% a los productos importados del país asiático.
El mandatario estadounidense advirtió a Pekín que si no revertía sus planes de aplicar aranceles de 34% a los productos estadounidenses ese mismo día enfrentaría tarifas adicionales de 50%, elevando el total de aranceles a ciertos productos chinos a 104%.
El Ministerio de Comercio de China indicó que los aranceles adicionales de EE.UU. generarían más "contramedidas" contra los productos estadounidenses.
En un comunicado escrito, el ministerio acusó al gobierno de Trump de extorsión resaltando que "si EE.UU. insiste en tomar este camino, China peleará hasta el final".
También ridiculizó la afirmación de Donald Trump de que sus aranceles son "recíprocos" calificándolos de ser "sin fundamento" y "una típica práctica unilateral de intimidación".
A través de la oficial Agencia de Noticias Xinhua, China calificó de "completamente absurda" la base de la lógica de Washington. "Yo te puedo golpear a mi voluntad y tú no puedes responder. En cambio, debes rendirte incondicionalmente", dijo acerca de la postura de Trump.
"Eso no es diplomacia. Es extorsión torpe disfrazada de política", añadió.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China llegó incluso a desempolvar un video de otro presidente estadounidense republicano que lanzó por redes sociales.
Se trata de un discurso de 1987 en el que el entonces presidente Ronald Reagan critica el uso de aranceles porque conducen a represalias que al final dañan la economía de EE.UU.
El discurso ha cobrado "un nuevo significado en 2025", según fuentes chinas.
Por otra parte, varias empresas estatales chinas se comprometieron a apoyar a los mercados financieros a medida que las tensiones con EE.UU. aumentan.
Además, el ente regulador financiero de China planea aumentar la proporción de inversión de fondos de seguros en el mercado de valores.
Los anuncios de las medidas parecen haber tenido algún efecto. La mayoría de las bolsas de valores asiáticas abrieron al alza este martes, recuperando las pérdidas inmensas del día anterior, aunque en Taiwán se registraron nuevas caídas.
Los analistas opinan que no es muy probable que China se retracte, pues no querrá "aparentar debilidad", aunque los aranceles propuestos podrían perjudicar severamente el sector de exportaciones chino.
Donald Trump escribió en su red social Truth Social que si China no revertía los aranceles en represalia de 34% anunciados por Pekín la semana pasada, él impondría aranceles adicionales de 50% este miércoles.
Trump ya había impuesto gravámenes de 20% a los productos chinos antes de anunciar una tasa de 34% más la semana pasada.
Una tarifa adicional de 50% llevaría el total de aranceles contra China a 104%.
El mandatario estadounidense también dejó la puerta abierta para negociar con otros países, que incluyó la reunión con el primer ministro de Israel Benjamín Netanyahu en Washington el lunes, pero recalcó que no está considerando detener los nuevos aranceles.
"No estamos mirando eso. Tenemos muchos, muchos países que están viniendo a negociar acuerdos con nosotros, y esos van a ser acuerdos justos", declaró Trump a los periodistas en la Oficina Oval.
No hay señales de que la guerra comercial entre las dos principales economías del mundo esté perdiendo fuerza.
Con el plazo de Washington de este miércoles para imponer extraordinarios aranceles adicionales a China si Pekín no retira sus medidas de represalia, la pregunta es: ¿quién cederá primero?
El enfrentamiento entre China, el mayor exportador del mundo, y Estados Unidos, su mercado más importante, tiene todo tipo de implicaciones.
Teléfonos inteligentes, computadoras, baterías de litio, juguetes y consolas de videojuegos conforman en grueso de las exportaciones chinas a EE.UU., pero hay muchas más cosas, desde tornillos hasta calentadores.
Un golpe a las exportaciones tendría repercusiones en un flujo de ingresos vitales para China, particularmente en un momento de ralentización de su economía.
A pesar de eso, China "bien podría estar dispuesta a soportar el dolor con tal de evitar capitular frente a lo que considera es la agresión de EE.UU.", comentó a la BBC Mary Lovely, experta en comercio de EE.UU. y China del Instituto Peterson en Washington DC.
Por otra parte, esto es un sendero de dos vías y no está claro como EE.UU. va a encontrar una alternativa al suministro de productos chinos en tan corto plazo.
Al margen de los aranceles mutuos, ambos países están "económicamente entrelazados de muchas maneras", comenta Deborah Elms, directora de política comercial de la Fundación Hinrich en Singapur.
"Sólo puedes imponer tantos aranceles por cierto tiempo. Pero hay otras maneras en que los países pueden golpearse mutuamente", añadió Elms.
Según Roland Rajan, economista en jefe del Instituto Lowy, China tiene un "amplio juego de herramientas" para usar en represalia, como depreciar su moneda o restringir a las empresas estadounidenses.
"Una cosa es la represalia para guardar las apariencias, otra es sacar todo el arsenal. No está claro si China quiere tomar esa ruta. Pero podría", expresó el economista.
Algunos expertos creen que EE.UU. y China podrían sostener conversaciones privadas. Desde su regreso a la Casa Blanca, Trump no ha hablado con Xi Jinping, aunque Pekín ha dado repetidas señales de querer hacerlo.
(Imagen: Getty Images)
PURANOTICIA // BBC MUNDO