El Palacio de La Moneda se ubica en el cuadrante de las calles Moneda, Morandé, Teatinos y la propia Alameda del Libertador Bernardo O’Higgins. En sus dependencias, a parte de las oficinas del primer mandatario, se ubican además la Secretaría General de la Presidencia y a la Secretaría General de Gobierno.
Originalmente, en el período de la colonia, este edificio fue proyectado para que albergara la Casa de Moneda, sin embargo, desde el año 1846 se convirtió en sede y residencia del primer mandatario.
El primero que durmió ahí fue Manuel Bulnes, otro de los destacados fue Carlos Ibáñez del Campo y Salvador Allende por ejemplo, quien también vivió un tiempo en el lugar.
Desde el regreso a la democracia ninguno de los mandatarios ha vivido en el lugar, es por eso que José Antonio Kast decida justamente aquello cobra una relevancia no menor y, además, claramente es un signo político de austeridad.
“Claramente nosotros hemos dado señales de que sí tenemos interés en vivir en La Moneda”, afirmó. El presidente electo justificó su postura señalando que ya existen residentes en el palacio, como la guardia, y que no tendría inconvenientes en adaptarse: “No tengo problema en dormir en el tercer piso. Pero si puedo llevar mi cama, puedo llevar mi comedor y puedo llevar mis cosas”. Incluso añadió: “No muevo nada, pero llevo un saco de dormir. Esa es mi voluntad”.
“Se llama la Casa de La Moneda y es históricamente el lugar donde han vivido los Presidentes de la República, yo vivo a más de una hora y media de la Casa de La Moneda. No voy a arrendar una casa especial para generarle más gastos al Estado”, complementó.
Finalmente, aclaró que la instalación en el Palacio será limitada: “Si tenemos un par de habitaciones donde podemos instalarnos con la Pía, no tenemos problema (…) Que nadie crea que vamos a ocupar la mitad de la casa presidencial con mis nueve hijos y mis cuatro nietos. No es así”.
Claramente un claro signo de los vientos de cambio que pueden comenzar a soplar en Chile desde marzo, y que puede marcar un precedente para los futuros mandatarios.