Los dos concejales de oposición echaron por tierra la propuesta del alcalde Jorge Sharp. Sin embargo, hay puntos en común, como el reconocer la urgencia de la reactivación del servicio no solo turístico, sino que también de transporte para las y los porteños.
Luego que la Contraloría General de la República informara que busca recuperar más de $620 millones en beneficio de las arcas fiscales, tras descubrir pagos irregulares por parte del Ministerio de Obras Públicas (MOP) en la restauración de los ascensores Villaseca y Monjas, de la Ciudad Puerto, cuyas obras fueron abandonadas o nunca se ejecutaron, el Municipio de Jorge Sharp elaboró una propuesta.
Según informó el propio jefe comunal, la denominada Alcaldía Ciudadana empujará la creación de una “empresa pública de transporte que se haga cargo de la gestión de los ascensores de Valparaíso como un sólo sistema”.
“El informe de la Contraloría es categórico, en los ascensores Monjas y Villaseca, este Gobierno gastó millones de pesos en trabajos no efectuados por parte de las empresas a cargo de la restauración de estos ascensores. ¿Quién paga las consecuencias de estas malas políticas? Los ciudadanos de Valparaíso que no han podido contar por años con sus ascensores”, denunció Sharp.
Junto a lo anterior, el Alcalde sostuvo que “exigimos que, no sólo se persigan las responsabilidades, sino que en concreto se apure el tranco para la apertura pronta de todos los ascensores de Valparaíso”.
Respaldando al alcalde Sharp, el concejal Vladimir Valenzuela (IND) señaló que “con los hechos denunciados, y ante la ineficiente gestión del MOP y por ende del Gobierno de Sebastián Piñera, en la mantención de nuestros ascensores, se hace urgente avanzar hacia una administración comunal de los ascensores”.
Sobre lo anterior, el edil puntualizó que “digo ‘nuestros’, porque estos son patrimonio tangible de Valparaíso, son parte de nuestra identidad e historia porteña. Por lo mismo, su gestión, operatividad y mantenimiento, deben enfocarse hacia un transporte que sea público, municipalizado e interconectado. Un orgullo para Valparaíso”, expresó.
La concejala Carla Sánchez (IND) agregó que “si bien es cierto, el Gobierno ha trabajado en la implementación y la mantención de algunos de ellos, dichos arreglos no han sido eficaces. Dichas fiscalizaciones no han sido suficientes, un ejemplo claro es el caso del ascensor Concepción, donde se advirtió su falla y se utilizó hasta su desplome. Hoy en día emerge un programa de recuperación de estos inmuebles históricos, pero no requerimos que solo el municipio se haga cargo, necesitamos que el Gobierno y el MOP una vez más no hagan oídos sordos a nuestros requerimientos. Necesitamos que estos bellos ascensores, estos atractivos turísticos, sigan funcionando como corresponde. Además, se debe hacer una triada -porque son transportes eléctricos- con el metro tren y los troles”.
Sin embargo, desde la oposición, echaron por tierra la propuesta del alcalde Sharp. La concejala de Renovación Nacional (RN) Marianela Antonucci manifestó su total rechazo.
“A mí no me parece la idea, ya que me deja inquieta el hecho de dónde sacará los recursos para esa empresa ¿del presupuesto municipal? Si está a cargo el MOP en el mantenimiento de los ascensores creo que lo mejor que puede hacer es emplazarlo y que asuman su responsabilidad”, fustigó.
Su colega de la Unión Demócrata Independiente (UDI), el concejal Dante Iturrieta aseveró que “en un principio, yo creo que una empresa pública no sé si es lo más correcto”.
A lo anterior agregó la urgencia de restablecer el servicio de los ascensores para la ciudad y que “eso es lo que hemos estado pidiendo en el concejo en reiteradas ocasiones. Por último que se transparente si están los dineros para continuar con los trabajos”.
Para finalizar su reflexión, el edil se mostró pesimista. “Creo que hace falta como medio de transporte, pero también como atractivo turístico. Con los ascensores paralizados y la ciudad como está, no tenemos ninguna posibilidad de que la gente quiera venir a Valparaíso”.
Continuando en esa misma línea, la concejala Antonucci acotó un emplazamiento directo al alcalde Sharp, mencionando que “el gran problema referente a cualquier asunto aquí en Valparaíso, ya sean los ascensores, la seguridad, los semáforos, señalética, un montón de cosas, es que falta mucha voluntad dentro del municipio como para hacer las gestiones correspondientes. Porque el asunto de los ascensores ya lleva harto rato y el alcalde no es capaz de defender cualquier cosa que corresponde a Valparaíso dado que él no tiene ningún apego con la ciudad”, fustigó la edil.
Incluso apuntó que “yo creo que debería irse a Punta Arenas, a Magallanes a ser alcalde porque realmente aquí en Valparaíso no lo hizo bien la vez pasada y esta vez lo está haciendo peor”.
Pese a las diferencias sobre el tipo de administración de los ascensores, sí hay un punto en común entre todas y todos los ediles, correspondiente al valor no solo patrimonial de este transporte, sino que para la calidad de vida de las y los porteños.
La concejala Gilda Llorente (IND) opinó que “la situación es que nosotros, los habitantes de esta ciudad, somos los dueños de los ascensores. Es un patrimonio nuestro. Nos han acompañado por más de 100 años”.
Su par también, independiente, Carla Sánchez, remarcó que los ascensores son parte de la cultura y del patrimonio de Valparaíso. “Durante décadas los porteños y porteñas nos hemos movilizado en ellos, ya sea para bajar del cerro al plan o subir del plan al cerro. También es utilizado por los turistas, que movidos por su belleza y su atractivo llegan a la región para fotografiarse o movilizarse. Por ello, no podemos quedarnos solamente en la foto, tenemos que hacerlos funcionar”.
Antonucci expresó lo mismo: “Los ascensores son nuestro patrimonio y lo que nos identifica como ciudad (...) Esperemos que la resolución de la Contraloría sea pronto para poder tomar las acciones correctas y recuperar nuestra identidad”, cerró la edil.
PURANOTICIA