Esta nueva ley centraliza la regulación de los casinos online para que quede en manos de la SCJ, la entidad gubernamental que ya estaba a cargo de la gestión de los casinos físicos en Chile.
Aprobado el pasado mes de diciembre, a lo largo de este 2024 entrará en vigor el nuevo marco regulador de casinos online Chile, con el que se intenta mejorar el nivel de protección de los jugadores y jugadoras chilenas a la hora de optar por el juego digital. Esta nueva ley centraliza la regulación de los casinos online para que quede en manos de la SCJ, la entidad gubernamental que ya estaba a cargo de la gestión de los casinos físicos en Chile.
Con este nuevo sistema, todos los casinos online Chile quedan supervisados por la SCJ, con lo que ya no tendremos que preocuparnos por comparar entre diferentes licencias internacionales a cargo de instituciones como la MGA o la CGC. Aunque se trata de entidades reguladoras de prestigio, a partir de este año la SCJ será la única institución a cargo de los casinos online en nuestro país, simplificando las cosas y ofreciendo mejores garantías.
Una de las ventajas del nuevo sistema es que la SCJ integrará en un único registro los sistemas de autoexclusión de los casinos físicos y los de los casinos online. De este modo, cualquier persona que decida jugar en un casino online en Chile podrá solicitar su bloqueo en las webs de juego digital si considera que está pasando por dificultades para controlar su afición por el juego, y este bloqueo también será efectivo en los casinos físicos.
Se trata de una medida que permite jugar con mayor seguridad en cualquier casino Chile online, y, además, es más abarcadora que los sistemas de autoexclusión vigentes en otros países. El marco legal chileno sigue entonces los pasos de otros sistemas como los del Reino Unido, Suecia o Alemania, pero va un paso más allá y ofrece medidas más comprehensivas, tanto en materia de protección a los jugadores como en materia tributaria.
Dos de los principales referentes internacionales a la hora de regular el juego online son la United Kingdom Gambling Commission –más conocida como la UKGC– y la GlüStV alemana. Estos dos sistemas fueron diseñados para regular los online casinos en sus respectivos países, e incorporan herramientas de autoexclusión del juego para facilitar la abstención a los jugadores que así lo soliciten.
El ejemplo más claro es el de GamStop, el organismo a cargo de la autoexclusión en los casinos digitales británicos. Cualquier online casino que opere en el Reino Unido debe registrar a sus jugadores en GamStop, de modo que, si el jugador lo solicita, su autoexclusión se aplicará a todos los casinos digitales del país. Y otro tanto ocurre en los casinos alemanes, que, desde el establecimiento de la GlüStV, también cuentan con un sistema de autoexclusión centralizado.
El problema está en que ambos sistemas solo se aplican a los casinos digitales, y no a los casinos físicos. Tanto en el Reino Unido como en Alemania, un jugador puede solicitar su autoexclusión en un online casino, pero seguir disfrutando del juego en los casinos físicos, o viceversa. Esto es algo que la nueva ley chilena supo prevenir, ofreciendo un grado de seguridad superior a la hora de jugar en los casinos Chile online.
Otro aspecto positivo de la nueva ley es el tributario. Como los casinos en línea Chile pasarán a estar regulados desde nuestro propio país, también tributarán sus ganancias en el SII, comenzando por el pago de una tasa de registro que ronda los 75.000 dólares. Un 20% de las ganancias netas de los casinos online se traducirán en impuestos pagados al Estado, lo que se estima que puede duplicar la recaudación procedente del juego en nuestro país.
Además, se establece una tasa paralela que obliga a los casinos chilenos a pagar un 2% de sus ingresos brutos de forma directa a tres entidades públicas de fomento del deporte nacional. Esta tasa es independiente de las ganancias netas de los casinos, así que el gobierno garantiza de este modo que todo casino Chileno en línea contribuya al bienestar social de nuestro país, incluso si registra pérdidas contables en alguna instancia.
Estas medidas tributarias vienen acompañadas de nuevas restricciones que impiden a los casinos no registrados operar en nuestro país. Sus plataformas web quedarán bloqueadas en territorio chileno, y, además, no tendrán la opción de publicitarse ni por televisión ni por internet. La idea consiste en incentivar a los casinos online a que cumplan con la ley, de modo que, aunque tendrán que pagar más, también se librarán de parte de su competencia.
Aunque la SCJ será la única entidad a cargo de regular los casinos online chilenos a partir de ahora, lo cierto es que sigue siendo buena idea revisar la trayectoria de los casinos digitales para verificar dónde tienen su sede real, y cuál es el regulador internacional que los monitorea en primera instancia. Los casinos online que están regulados por la MGA de Malta, la CGC de Chipre, o Curaçao eGaming en Curaçao, suelen ser mucho más prestigiosos y seguros.
La MGA incluso dispone de su propio sistema de autoexclusión del juego, que sigue vigente para los jugadores chilenos que se hayan registrado en alguno de sus casinos, y que era hasta ahora casi la única opción que había disponible en nuestro país para protegernos de los excesos del juego digital. Por eso, si un casino online regulado por la SCJ está inspeccionado a su vez por alguna de estas entidades, se trata de una buena señal.
En todo caso, no podemos olvidar que la responsabilidad ante el juego –ya sea físico o presencial– es ante todo nuestra. Juegos como la ruleta o el Blackjack pueden depararnos grandes premios, pero también podemos perder en ellos. La mejor manera de afrontar la afición por el juego es limitando de forma estricta el presupuesto que dedicamos a los casinos, y nunca gastar más de lo que podamos permitirnos. ¡Disfruta de forma prudente!
PURANOTICIA