El médico Craig Spencer superó la enfermedad y dejará el centro médico en el que se encontraba en la "gran manzana".
El único enfermo de ébola en el estado de Nueva York, el médico Craig Spencer, saldrá mañana del hospital en donde quedó internado el pasado 23 de octubre, según informaron hoy fuentes del equipo que lo atienden.
De acuerdo con el diario The New York Times, la próxima salida de Spencer del hospital Bellevue fue confirmada hoy por dos fuentes que están siguiendo su tratamiento médico, pero el centro sanitario ha evitado hacer comentarios al respecto.
Spencer se contagió de ébola cuando estuvo cuidando enfermos en Guinea con la organización Médicos sin Fronteras (MSF), desde mediados de septiembre hasta mediados de octubre, cuando regresó a Nueva York, donde reside, después de una escala en Bruselas.
El caso del único diagnosticado con ébola en el estado motivó a las autoridades de Nueva York y del vecino estado de Nueva Jersey a reforzar los controles de entrada en sus aeropuertos a personas procedentes de los países africanos más afectados por la epidemia.
El diario apunta que se desconoce si, una vez dado de alta, Spencer se dirigirá al domicilio en el que habitaba, en Manhattan, donde se encuentra en cuarentena su prometida, Morgan Dixon.
Responsables médicos de Nueva York han sido muy esquivos a la hora de mencionar el tratamiento que ha recibido Spencer.
Según el Times, fue tratado con un fármaco experimental no precisado y también recibió plasma de una persona que había superado el ébola, la misionera Nancy Whitebol, que se infectó en Liberia, el país más afectado por la epidemia.
El ébola ha causado más de 5.000 muertos, casi todos en Liberia, Sierra Leona y Guinea, y ha infectado a más de 13.000 personas, según datos de la Organización Mundial de la Salud.
En Estados Unidos, aunque ha habido varios casos de infectados, ya sea en el país o cumpliendo misiones en África Occidental, sólo ha parecido una persona de nacionalidad liberiana, Thomas Duncan, en Dallas, adonde había llegado para una visita familiar.
EFE