"Estos ataques no alterarán la determinación de Naciones Unidas de apoyar al pueblo de Mali y su proceso de paz", aclaran en un comunicado.
La ONU condenó el ataque que sufrieron este jueves los "cascos azules" destinados en Mali, con un saldo de seis muertos y cinco heridos, y dijo que esa acción no alterará su determinación de seguir apoyando a ese país africano.
El ataque, lanzado contra un convoy de la misión de la ONU en Mali (Minusma) integrado por efectivos de Burkina Faso, se produjo entre Tombuctú y la frontera con Mauritania y fue reivindicado por la rama de Al Qaeda en el Magreb.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en una declaración difundida por su oficina de prensa, dijo que esa emboscada constituye una "grave violación a la ley internacional" y pide que los responsables sean llevados ante la Justicia.
"Estos ataques no alterarán la determinación de Naciones Unidas de apoyar al pueblo de Mali y su proceso de paz", añade la declaración.
También recuerda que por "actos hostiles" sufridos por los "cascos azules" en ese país desde que comenzó a operar la Minusma, en abril de 2013, ya han perecido 43 efectivos, 10 de ellos sólo en lo que va de año, y 166 han resultado heridos.
Pn/ci
EFE