A pesar de la intervención de las autoridades -con camiones, sirenas e incluso alimentos para incitarlos a que regresen a la reserva-, los paquidermos han seguido su camino.
A mediados del mes de mayo, una manada de elefantes asiáticos salió de la reserva de Xishuangbanna, una región china fronteriza con Laos y Myanmar, y llevan unos 500 kilómetros recorridos en dirección al norte.
A pesar de la intervención de las autoridades -con camiones, sirenas e incluso alimentos para incitarlos a que regresen a la reserva-, los paquidermos han seguido su camino.
"No tenemos forma de saber a dónde se dirigen", señaló Chen Mingyong, profesor de la Universidad de Yunnan y especialista en el estudio de elefantes salvajes, a la emisora estatal china CCTV.
Hace más de 20 días que los elefantes salieron de la reserva natural donde vivían.
"Es común que los elefantes asiáticos migren, pero en el pasado eso ha sido principalmente para buscar comida dentro de su hábitat. Un éxodo hacia el norte es bastante raro", agregó.
La mayoría de los científicos que han sido consultados sobre el tema señalan que una de las posibles razones para esta extraña migración es el deterioro de su hábitat dentro de la misma reserva.
Ahora la manada se encuentra a unos 20 kilómetros de la ciudad de Kunming, donde sus habitantes están preocupados por el posible paso de los animales.
Los elefantes ya han recorrido más de 500 kilómetros.
La manada camina con tres bebés elefantes.
PURANOTICIA // BBC MUNDO