No existen cifras definitivas de cuántas personas murieron a causa de los bombardeos, ya sea por la explosión inmediata o en los meses siguientes debido a las heridas y los efectos de la radiación.
Este viernes, Japón conmemora los 76 años de la bomba atómica que Estados Unidos lanzó en la ciudad de Hiroshima.
El 6 y 9 de agosto de 1945, militares estadounidenses lanzaron sobre Hiroshima y Nagasaki las dos únicas bombas nucleares que se hayan utilizado en una guerra.
Juntas fueron los ataques más letales que jamás hayan ocurrido, en los que se estima que murieron alrededor de 200.000 personas.
Desde la perspectiva de EE.UU., tenían el objetivo de presionar la rendición de Japón y poner fin a la Segunda Guerra Mundial.
Y en caso de que no fueran suficientes, Washington tenía prácticamente lista una tercera bomba atómica.
Su apodo era Rufus, y consistía en un núcleo de plutonio, similar al que se utilizó en la bomba Fat Man, que detonó sobre Nagasaki.
Sobrevivientes, allegados y un puñado de dignatarios extranjeros asistieron a la ceremonia para honrar a las víctimas y hacer un llamado por la paz en el mundo.
Los participantes guardaron un minuto de silencio a las 08:15 locales, la hora en que la bomba atómica estadounidense fue lanzada sobre la ciudad hace 76 años.
Debido al alza de casos de Covid-19, la ceremonia no fue abierta al público, pero sí se pudo seguir en internet.
Cabe señalar que no existen cifras definitivas de cuántas personas murieron a causa de los bombardeos, ya sea por la explosión inmediata o en los meses siguientes debido a las heridas y los efectos de la radiación.
Los cálculos más conservadores estiman que para diciembre de 1945 unas 110.000 personas habían muerto en ambas ciudades.
Otros estudios afirman que la cifra total de víctimas, a finales de ese año, pudo ser más de 210.000.
PURANOTICIA