La Fiscalía de Indonesia indicó hoy que la próxima ejecución de varios reos condenados por narcotráfico, incluido un brasileño, se retrasará al menos hasta después del Congreso Asia-África previsto a finales de este mes.
"La próxima celebración del congreso Asia-África es la principal consideración para suspenderlo", dijo Tonny T. Spontana, el portavoz de la Fiscalía, que previamente se había comprometido a ejecutar a los presos en abril, informa el diario "The Jakarta Post".
Las autoridades indonesias no quieren ejecutar a los reos cuando los mandatarios de África y Asia se encuentren en Indonesia para asistir al congreso y conmemorar el 60 aniversario de la Conferencia de Bandung entre el 18 y 24 de abril.
Entre los 11 reos en el corredor de la muerte, a la espera de ser ajusticiados ante un pelotón de fusilamiento, hay varios extranjeros de Francia, Brasil, Filipinas, Nigeria y Ghana.
El brasileño Rodrigo Gularte fue apresado en 2004 con varios kilogramos de cocaína escondidos en unas tablas de surf.
Las autoridades brasileñas y los familiares de Gularte han alegado de el preso padece de esquizofrenia, por lo que no debería ser ejecutado.
A pesar de las peticiones de clemencia por parte de países como Australia, Brasil o Francia, el presidente indonesio, Joko Widodo, ha reiterado la firmeza de su Gobierno contra el narcotráfico y ha descartado la clemencia para ninguno de los condenados.
El pasado enero, Indonesia fusiló a 6 narcotraficantes, incluido el brasileño Marco Archer Cardoso Moreira, lo que causó una crisis diplomática en la que intervino la presidenta brasileña, Dilma Rousseff.
Indonesia, que reanudó las ejecuciones de reos en 2013 después de cinco años de tregua, mantiene a 133 prisioneros en el corredor de la muerte, de los cuales 57 son por narcotráfico, dos por terrorismo y 74 por otros delitos.
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EFE