Aaron Gray-Block llegó el pasado sábado al aeropuerto de Bangalore pero los responsables de Inmigración comprobaron que "está incluido en una lista negra".
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Las autoridades indias negaron la entrada en el país a un activista de Greenpeace al estar incluido en una lista negra en la India, donde la organización ecologista mantiene un enfrentamiento con el Gobierno que estuvo a punto de provocar su cierre, informó hoy a Efe una fuente oficial.
Aaron Gray-Block, miembro de Greenpeace Internacional, llegó el pasado sábado al aeropuerto de Bangalore, en el sur del país, con un visado con entrada múltiple durante un año pero los responsables de Inmigración comprobaron que "está incluido en una lista negra", dijo un portavoz del Ministerio del Interior, Kuldeep Singh.
"Descubrieron que la visa de negocios no era compatible con el hecho de estar en la lista", afirmó el portavoz, quien no concretó los motivos de la inclusión en el listado.
Gray-Block, responsable de la campaña de respuesta ante crisis y de relaciones con los medios en la organización internacional, desembarcó procedente de Sidney en el aeropuerto internacional Kempegowda, aseguró Singh.
El activista manifestó en un comunicado no haber recibido "ninguna comunicación del Ministerio del Interior o de Exteriores -de la India- al respecto", después de haber obtenido el visado en la Embajada india en Australia, de donde es natural, y señaló que viajaba para conocer el trabajo de Greenpeace en el país asiático.
"Cualquier indicio de delito es una farsa y una calumnia. No hay ninguna razón para incluirme en ninguna lista negra", añadió este responsable de Greenpeace, a quien en un viaje anterior no le fue negada la entrada en la India.
Una portavoz de Greenpeace India, Anindita Datta, declaró a Efe que las autoridades indias no ofrecieron "ninguna razón, ni dieron ninguna explicación" de por qué se negó la entrada pese a que este grupo se puso en contacto con el Ministerio del Interior.
El activista regresó a Australia en un vuelo con escala en Malasia, donde le fue devuelto su pasaporte, según la portavoz.
El incidente se produjo después de que la semana pasada el Tribunal Superior de Nueva Delhi desbloqueara dos cuentas bancarias de Greenpeace, lo que permitió a este grupo continuar sus actividades y evitar su cierre en India, ya que solo disponía de fondos hasta junio.
Interior suspendió temporalmente el registro de Greenpeace como asociación y congeló siete cuentas bancarias suyas por entender que su financiación desde el exterior afectaba "perjudicialmente" al interés público y económico del Estado indio.
El Gobierno indio y el grupo ecologista mantienen desde junio del año pasado un contencioso, que Greenpeace atribuye a una campaña de desprestigio en respuesta a las protestas que organiza sobre el impacto ambiental de proyectos mineros y energéticos en la India.
Pn/fg
EFE
