La medida fue una de las primeras adoptadas por los nuevos controladores del recinto: la Clínica Indisa y el grupo financiero Euroamérica, quienes desde enero comparten la propiedad del establecimiento de salud en partes iguales.
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Un remezón laboral se vivió en las últimas horas al interior de la Clínica Las Condes (CLC), luego de que se confirmara la desvinculación de un número indeterminado de trabajadores como parte de un proceso de “racionalización”.
La medida fue una de las primeras adoptadas por los nuevos controladores del recinto: la Clínica Indisa y el grupo financiero Euroamérica, quienes desde enero comparten la propiedad del establecimiento de salud en partes iguales.
En un escueto comunicado, la clínica confirmó la salida de parte de su personal, sin entregar mayores detalles sobre el número de afectados ni los criterios utilizados. Además, se indicó que también se redujo la planta ejecutiva y se ajustaron las dietas de los miembros del directorio.
Desde el Ministerio del Trabajo, el titular de la cartera, Giorgio Boccardo, reaccionó al anuncio señalando que “los trabajadores que consideren que su despido fue arbitrario deben presentar la denuncia correspondiente”. La autoridad recordó que existen mecanismos legales para fiscalizar este tipo de procesos, especialmente en contextos de reorganización empresarial.
La operación que derivó en este cambio de administración se concretó el 10 de enero, con el ingreso de los nuevos socios estratégicos. Según trascendidos, la reorganización busca sanear la situación financiera del recinto y mejorar su sostenibilidad operativa.
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