Dina Boluarte es investigada por supuestamente estar en posesión de más de una docena de onerosos relojes con los que ha aparecido públicamente desde que comenzó en el gobierno.
Relojes de lujo, un allanamiento y un pedido de destitución: Perú vive nuevamente un escándalo político que pone en entredicho la estabilidad del gobierno de Dina Boluarte.
La mandataria del país sudamericano es investigada por supuestamente estar en posesión de más de una docena de onerosos relojes con los que ha aparecido públicamente desde que comenzó en el gobierno como vicepresidenta y ministra de Desarrollo e Igualdad, y más adelante como sucesora del presidente Pedro Castillo.
La fiscalía peruana la señala por enriquecerse ilícitamente y por omitir la declaración de las joyas en sus informes de bienes.
Fue a partir de un reportaje publicado el pasado 14 de marzo por el medio La Encerrona que comenzaron las indagaciones.
Los periodistas de la plataforma multimedia analizaron miles de fotografías de archivo de Boluarte en eventos a los que asistió con los relojes, algunos posiblemente marca Rolex, valorados en miles de dólares.
Como parte de la pesquisa, las autoridades irrumpieron en su residencia y en el Palacio de Gobierno entre la noche del viernes y la madrugada del sábado pasados, acción que fue duramente criticada por la presidenta.
El mismo sábado, en un video pregrabado en el que aparecía flanqueada por sus ministros, Boluarte dijo que le parecía "sorprendente" la manera en que se realizó el operativo y que es víctima de un "acoso sistemático".
"Es una medida arbitraria, desproporcionada y abusiva", comentó.
En su alocución, la primera mujer en presidir Perú apenas mencionó el caso en su contra, porque, alegó, así se lo recomendó su defensa.
"¿Desde cuándo un sector de la prensa se preocupa en lo que usa o no usa una presidenta o un presidente? Espero y quiero creer que no es un tema sexista o de discriminación", sostuvo.
También el sábado, el partido Perú Libre presentó una moción de vacancia (destitución) que por el momento solo cuenta con el respaldo de los partidos de centro izquierda.
En esta nota te presentamos tres claves para que puedas entender esta nueva controversia en Perú, de cara a lo que ocurrirá esta semana, cuando Boluarte tendrá que declarar ante la fiscalía y los congresistas debatan la continuidad de su presidencia.
La investigación contra Boluarte comenzó por una publicación del medio La Encerrona, cuyo equipo recibió informes de varias fuentes que aseguraban que la mandataria usaba relojes marca Rolex, posiblemente valorados en miles de dólares, y de los cuales no había rendido informes.
Fue por dicha razón que en febrero de este año -cuenta a BBC Mundo Marco Sifuentes, director del medio de comunicación- decidieron analizar las fotografías de las actividades públicas de Boluarte archivadas por el propio gobierno.
Armaron una base de datos y se dieron cuenta que la mandataria, desde que comenzó como ministra de Desarrollo e Inclusión Social en 2021, ha lucido unos 15 relojes.
En sus primeras apariciones, tenía uno marca Michael Kors, que, afirma Sifuentes, no tenía un valor mayor a los US$200. Pero mientras pasaron los meses en el ministerio, y luego de que asumió la presidencia del país en diciembre de 2022, la funcionaria comenzó a ser vista con modelos que se cree son más caros.
“Nosotros corroboramos que uno de ellos era un Rolex, valorado en por lo menos US$14.000, porque teníamos muchas imágenes de alta calidad. No quisimos decir que los demás eran Rolex, teníamos dudas sobre otros tres, pero medios peruanos afirman que son de la misma marca luego de consultar con expertos”, dice Sifuentes.
En el país sudamericano, un funcionario electo debe presentar una declaración jurada sobre los bienes que superen el valor de 10.300 soles (US$2.774), explica, por su parte, el también periodista peruano Martín Riepl.
La Encerrona confirmó que Boluarte no había informado sobre los relojes, y que no habían sido adquiridos por ninguna agencia gubernamental.
“Pedimos información a la Cancillería, que se encarga del protocolo, a ver si había comprado algún reloj, también al despacho presidencial, pero nos dijeron que no. También le pedimos explicaciones a Dina Boluarte, pero no nos respondió. En sus declaraciones juradas no hay un asomo de estos aparatos. Si fueron regalos, también tenía que haberlos declarado”, detalló Sifuentes.
Desde entonces la mandataria ha tenido pocas apariciones públicas. Pero en una de ellas, realizada el pasado 16 de marzo, dijo que el supuesto Rolex al que hace referencia La Encerrona era una posesión de “antaño”, que había comprado con su esfuerzo.
“Lo que yo quiero decirle, no a la noticia tendenciosa, sino al Perú entero, es que trabajo desde mis 18 años y lo que tengo es fruto de mi esfuerzo y de mi trabajo. El artículo en particular es de antaño, lo uso muy eventualmente”, indicó, para luego negarse a ofrecer más respuestas sobre el tema.
Sifuentes asegura que la contestación de la presidenta no es “satisfactoria”, porque los relojes “son modelos de esta década”.
Riepl añade que Boluarte, antes de ocupar sus posiciones políticas, fue funcionaria de la agencia encargada de expedir las identificaciones en Perú, donde tenía un sueldo de unos 4.500 soles mensuales (poco más de US$1.000). Mientras que su salario como ministra era de 30.000 soles (US$8.000), cifra que se redujo a 15.500 (US$4.000) cuando llegó a la presidencia.
Medios locales también informaron que las autoridades detectaron unos US$300.000 en depósitos de origen desconocido realizados a las cuentas personales de Boluarte antes de que asumiera su cargo.
Y por esto el pasado 18 de marzo la Fiscalía peruana decidió abrir una investigación.
Durante el viernes Santo en la noche y la madrugada del sábado los peruanos vieron con sorpresa cómo las autoridades abrieron a golpes la residencia de Boluarte en el distrito limeño de Surquillo.
El operativo, conducido por fiscales y agentes de la policía, fue transmitido por la cadena Latina Televisión. También fueron registrados el Palacio de Gobierno y el vehículo de la presidenta.
Pese a que en los últimos años el país ha visto cómo sus políticos son investigados y procesados penalmente, incluso los presidentes, Riepl afirma que la manera en la que las autoridades irrumpieron en la vivienda de Boluarte es poco usual.
La Policía alegó que esperaron y como nadie atendía entraron por la fuerza. La presidenta dijo que ella no estaba, sino su hijo, y que era de noche y no dieron tiempo de atender a los llamados.
El registro ocurrió porque la semana pasada Boluarte no se presentó a declarar y a mostrar los supuestos relojes en dos oportunidades, luego de ser citada por el Ministerio Público, alegando que tenía una agenda muy cargada.
“La Fiscalía solicitó una orden judicial para allanar su vivienda porque había un riesgo procesal inminente de que los relojes se perdieran, deterioren o destruyan en medio de la investigación”, explica Riepl.
En el allanamiento no se encontraron los relojes, pero sí algunas joyas y documentación que refleja la adquisición de al menos un Rolex el 8 de julio de 2023.
“Esto contradice las declaraciones de Dina Boluarte, cuando comentó que su reloj era fruto de su trabajo desde que tenía 18 años y que era de antaño", continúa Riepl.
La declaración de Boluarte ante Fiscalía había sido reprogramada para el próximo 5 de abril, pero ante el allanamiento, la propia presidenta pidió adelantarla “lo antes posible”.
El Ministerio Público aún no ha respondido a su solicitud.
A raíz de estos hechos, la bancada del partido Perú Libre presentó un pedido de destitución contra la presidenta ante el Congreso, con la firma de al menos 26 de los 130 congresistas que conforman el cuerpo.
"Acabamos de presentar la moción de vacancia (destitución) contra Dina Boluarte, por incapacidad moral permanente por el tema de los Rolex, en ejercicio de la función parlamentaria de control político", informó la parlamentaria Margo Palacios el sábado en su cuenta de X.
Entre los que apoyan el documento, la mayoría son legisladores de Perú Libre y de otros partidos de izquierda como Cambio Democrático, Juntos por el Perú y el Bloque Magisterial, que respalda al expresidente Pedro Castillo.
Para este grupo político Boluarte ocupa la presidencia de forma inconstitucional.
La izquierda también la responsabiliza por los 80 muertos y más de 1.000 heridos que fueron víctimas de la represión policial durante las protestas que afloraron luego del arresto de Castillo.
La abogada asumió su cargo actual en diciembre de 2022, luego de que su predecesor fue detenido por disolver el Congreso y declarar un gobierno de excepción.
En el Congreso de Perú, detalla Riepl, se necesitan 87 de 130 votos para destituir a un presidente. Según él, “no hay los votos para sacarla, sino que diversas bancadas han pedido que transparente el origen de los relojes, porque consideran muy apresurada una vacancia”.
Para el periodista de Latina Noticias y colaborador de BBC Mundo, si los congresistas aprobaran un juicio político contra Boluarte, eso podría llevar a un adelante de elecciónes, "lo que implica que deberán dejar sus curules ellos también, algo que no quieren enfrentar hasta 2026, cuando se acabe su término”.
Esto no quiere decir, continúa Riepl, que los legisladores no le pidan cuentas a la presidenta sobre los relojes y la citen a declarar ante el Congreso.
Pero cree que “si no lo explica de forma correcta, lo que puede pasar es que sea encarpetado, y su debate retrasado, hasta que les sea últil a los congresistas. Es una carta que pueden jugar en algún momento si en el camino no aparece una más potente”.
(Imágenes: Getty Images)
PURANOTICIA // BBC MUNDO