“Ella lo buscó mucho, pero no ha tenido respuesta. Lo ha pasado muy mal”, aseguró la expareja del conductor de “Círculo Central”, revelando que además aún no existe una pensión de alimentos establecida.
Días atrás, el comentarista deportivo Mauricio Israel fue encarado en pantalla por la comunicadora Savka Pollak, a quien increpó por la relación que mantiene con su hija, fruto de su relación con su expareja, Marisol Gálvez.
“A mi hija jamás le ha faltado un centavo. Ha recibido el apoyo que la han dejado recibir... Este año no la he podido ver, no porque yo no quiera (...) Jamás he dejado de pagar la pensión alimenticia de mi hija, nunca le ha faltado nada, salvo tener a su papá al lado y nada me gustaría más que ella estuviera conmigo”, fueron parte de los dichos de Israel en vivo en el programa “Sígueme y te Sigo” de TV+.
Bajo este contexto, quien quiso romper el silencio y contar su verdad fue la propia expareja de Israel y madre de su hija, Marisol Gálvez, quien mantuvo una íntima conversación con “Publimetro”.
En la entrevista, la mujer recordó cuando el año 2007 ambos se enteraron que iban a ser padres. “Mauricio estaba feliz, saltaba en una pata. Estaba súper contento”, comenzó relatando, asegurando que posteriormente, luego del nacimiento de la pequeña Sara, Israel “estaba 24/7 con ella. Dormían juntos. Se iba al programa y volvía rajado. Fue un excelente papá, pero durante un año y cuatro meses”.
Todo esto cambio de forma rotunda el año 2008, cuando el conductor de “Círculo Central” dejó el país un 24 de diciembre por problemas económicos, donde la comunicación entre ellos cada vez fue más escasa, momento en el que Marisol recibió una demanda de Israel, quien se encontraba radicado en Miami, en la que intentaba asegurar las visitas de su hija fuera del país. “Ese año él se casaba en Colombia y vino a repartir los partes de matrimonio. Se supone que Sarita se iba a la boda, pero no la vino a buscar. Ella se quedó esperándolo con las maletas hechas y un vestido de princesa que yo le había comprado para que fuera al casamiento de su papá”, desclasificó Gálvez.
“Mauricio se transformó. Dejó de ser esa persona tan querendona con Sara y se fue poniendo frío. Cumplía con comprarle el uniforme, los útiles, pero de todo lo demás me hacía cargo yo. No sé qué le pasó. Era yo la que insistía para que tuviera un vínculo con su hija”, aseguró Marisol, revelando que “desde que él llegó a Chile en diciembre del año pasado, no la ha visto”.
“Sarita lo único que quería era verlo, pero estaba muy nerviosa y le daba nervios juntarse sola con él. Eso él no lo entendió, pensó que desconfiaba de él y ahí quedó la escoba. Ella lo buscó mucho, pero no ha tenido respuesta. Lo ha pasado muy mal”, agregó sobre la actual relación entre su hija e Israel.
Respecto al aporte económico que recibe por parte de Israel, Gálvez señaló en conversación con el medio mencionado anteriormente, que “hasta el día de hoy no hay una pensión establecida. Mauricio le da un monto que, él o la familia, no sé quién, decidió darle esa cantidad. El problema, es que no alcanza. Ahora ella es adolescente, tiene otras necesidades y se ha tenido que prohibir de muchas cosas. No tiene Isapre y la tuve que sacar del colegio Bertait Collage, donde entró a los dos años y medio. Ahora va en un colegio público”.
“Me gustaría mucho tener una relación de padre con él, para que Sara no sea la vocera de ambos. Eso le hace muy mal, pero no tengo cómo comunicarme con él. De mí, él siempre habla pésimo, pero yo quiero dejar en claro que nunca le he prohibido verla, nunca”, concluyó Marisol.
PURANOTICIA