A falta de un año para la Elección Municipal, el licenciado en Ciencias Religiosas develó a Puranoticia.cl que es una opción que está meditando, pero que dependerá de los resultados de la eventual nueva Constitución y del proyecto colectivo que pueda formar.
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Si bien, el inicio del descrédito de la política en nuestro país tuvo su origen más marcado a raíz de los casos Penta y SQM, a mediados de la década pasada; lo cierto es que el estallido social profundizó aún más la brecha entre la ciudadanía y sus representantes, dando paso a una serie de candidaturas independientes que tuvieron buena acogida en las elecciones municipales y de constituyentes, el año 2021.
Este fenómeno podría no acabar ahí, pues ya han surgido nombres de posibles candidatos ciudadanos que desean competir en la Elección Municipal de 2024, buscando administrar las comunas que los han marcado o donde han ejercido gran parte de su labor. En este contexto se encuentra –por ejemplo– Viña del Mar.
Y es que, por un lado, las figuras que tiene la centro-derecha se encuentran un tanto desgastadas y hoy no logran generar mayores consensos ciudadanos, como es el caso de políticos de trayectoria como Macarena Urenda o Jaime Varas, ambos militantes de la Unión Demócrata Independiente (UDI). Otro caso es el de Carlos Williams, rostro de Renovación Nacional (RN), quien no convence mucho al ser uno de los más cercanos a la alcaldesa Macarena Ripamonti, figura duramente criticada por el sector.
Por otro lado, las posibles cartas de la centro-izquierda tampoco han movido masas en este objetivo de quedarse con el Municipio de Viña del Mar. Marcela Varas, ex Concejala del Partido por la Democracia (PPD); Sandro Puebla, concejal independiente pero cercano al Partido Socialista (PS); René Lues, el crítico concejal de la Democracia Cristiana (DC); y Alejandro Aguilera, de Convergencia Social (CS) y el más "díscolo" de las figuras del Frente Amplio; son sólo algunos de los nombres que suenan, pero que no tienen mayor proyección política, según relatan fuentes políticas de Puranoticia.cl.
Es bajo este contexto de incertidumbre, de faltas de figuras potentes que puedan pelearle la Alcaldía a Macarena Ripamonti y restando más de un año para la Elección Municipal de 2024; que aparece un nombre surgido desde los campamentos y desde lo más profundo del mundo social de Viña del Mar: el de Marcelo Catril Mora, quien por 22 años se desempeñó como sacerdote, además de los 10 en el seminario.
Respondiendo a los rumores surgidos desde los campamentos de la Ciudad Jardín, este licenciado en Ciencias Religiosas, de 49 años, confesó a Puranoticia.cl que ser Alcalde de Viña del Mar es algo que se lo ha planteado y que no descarta.
"Yo no lo descarto, pero me he dado cuenta que en distintos sectores donde estamos trabajando, hay personas que me dicen que desde la confianza se puede construir algo... un proyecto, pero un proyecto común, con gente con sentido común. Eso es muy importante, porque la transversalidad que tuve y que tengo –porque fui sacerdote y no lo niego ni reniego– es un valor agregado que tengo y que comparto en familia, y donde me dice mucha gente que lo haga. Aún hay tiempo", comentó Catril.
De igual forma, sostuvo que "es algo que no lo descarto, pero sí creo que el próximo Alcalde o Alcaldesa debe tener una confianza tal de saber que hay que integrar a muchas personas y no ser de un sólo grupo. Eso es muy importante".
Consultado respecto de las características y atributos que debiera tener el futuro Alcalde de Viña del Mar, el ex sacerdote que hoy se desempeña desde la organización comunitaria «Puentes de Amor», explicó que "debe tener una autoridad definida, debe ser una persona integradora y que no actúe solamente por los sectores políticos, porque estar en un Municipio no es para un sector político".
Luego profundizó esta idea indicando que "no concibo un Municipio como una manada y un rebaño. Yo vengo del mundo del rebaño, que es la Iglesia, donde funciona este esquema y donde hay un pastor y un rebaño de ovejas; por lo tanto, no es un sector democrático, aunque promuevan la democracia para la sociedad, pero la Iglesia en sí misma –por Teología– es un pastor y sus ovejas; pero tampoco el mundo civil puede ser de manadas, porque ésta llega, arrasa, come, destruye y deja para sí".
En ese sentido, lanzó una crítica a la actual administración frenteamplista en el Gobierno comunal de la Ciudad Jardín: "Los municipios tienen todo: legal y profesional, para poder trabajar, y para eso hay métodos de control, está la ley y sobre todo la probidad de las personas que están a cargo. Hoy creo que no hay personas que estén dando el ancho y parece que la ideología prima por sobre la realidad. La realidad hay que medirla, porque si las cosas no están definidas, no se puede medir; y si no están medidas, no se pueden mejorar. Ese es un principio de Kelvin de hace casi dos siglos".
Marcelo Catril también reveló a Puranoticia.cl que incluso ya ha sido tentado por diversos sectores políticos para iniciar una campaña bajo sus colores: "He sido tentado por varios sectores porque gracias a Dios tengo amigos de distintos sectores políticos, a los cuales quiero muchísimo, ya sea de derecha y de izquierda, y que me han dicho que me apoyan y que me pueden ahorrar un camino de firmas", dijo.
No obstante, el ex religioso que tiene un magíster en Comunicación Estratégica aseguró que prefiere seguir optando por su independencia: "Yo tengo un capital muy importante, que es mi independencia; y sé que cuando tome mi mano, sea más de izquierda o más de derecha, ciertamente la confianza es la que se puede perder para muchas personas. Entonces para mí, la independencia es fundamental", señaló Catril.
Consultado respecto a su mirada política, dijo que "yo tengo la mía, porque es imposible no tenerla, pero si existiera la posibilidad y hay gente que me quiera apoyar y que a mí me convenza de que yo puedo ser una alternativa, sería muy abierta, confiando en las capacidades de las personas, gente con sentido común y con un propósito común. El Alcalde no legisla, sino que ejecuta lo que el país ya tiene". Sin embargo, aseguró tajante que no es ni de ultra izquierda ni de ultra derecha.
La decisión que deberá adoptar Marcelo Catril –según reconoce– estará muy influenciada por lo que ocurra en Santiago con el Consejo Constitucional, pues aseguró que una "base clave" para aceptar o rechazar una campaña por la Alcaldía de Viña del Mar es si se aprueba y cómo se aprueba una nueva Carta Magna para el país.
"Una base clave es la Constitución, si se aprueba o no se aprueba; esto, como una de las señales para ver dónde uno va pisando, porque nuestro país sólo se va a gobernar desde la política, pero desde la política bien entendida. La política es hermosa, es la mejor manera de ejercer el amor, como decía Paulo VI; pero cuando se cae en la politiquería y descalificaciones que vemos constantemente, es un dolor".
Junto a adelantar que desea conocer algunas definiciones políticas que surjan desde la eventual nueva Constitución, fue directo al afirmar que "yo no estoy para suicidarme políticamente", sino que está "para servir a la gente, ya que mi vida es un servicio a los demás, y lo voy a hacer siempre y en cualquier instancia".
Por último, consultado por los principios de la Iglesia que le gustaría poder aplicar en un eventual Gobierno comunal, el ex sacerdote planteó que "yo creo que lo que un sacerdote podría aplicar es la doctrina social de la Iglesia, los 2 mil años donde se ha predicado desde la verdadera justicia, desde la verdad, desde la dignidad que nos dejó Jesucristo. Ese es el fundamento de todo orden político, más allá de cualquier hombre de la historia que cayera en extremos".
Todo este relato del ex religioso que se hizo ampliamente conocido en los cerros de Viña del Mar, sobretodo en los campamentos, lo posiciona inesperadamente como uno de los adversarios más fuertes que podría tener la actual Alcaldesa de cara a lo que será la Elección Municipal del próximo año, donde un Marcelo Catril versus Macarena Ripamonti podría ser la gran batalla ciudadana que deberán deliberar los vecinos, a falta de candidatos fuertes surgidos desde las entrañas de la política convencional.
A falta de la gran definición que deberá adoptar en los próximos meses, el ex cura que hoy cuenta feliz que tiene una pareja y que juntos crían a un niño, reconoce que "estimo mucho" a la jefa comunal, con quien "nos saludamos y conversamos amablemente" cuando se ven, aunque últimamente no han coincidido, a la espera de que la autoridad responda a la Ley de Lobby, donde ya hace algunas semanas solicitó una audiencia.
PURANOTICIA
