Sólo tres de las 16 cámaras están operativas y ediles apuntan a qué se ha hecho con los dineros recibidos por el Royalty. Junta de Vecinos del sector recuerda que hace poco se reunieron con la administración y les plantearon sus temores por los delitos en horarios nocturnos.
Aunque las noticias más graves en términos policiales han ocurrido últimamente en otras comunas, los vecinos y concejales de Quilpué alzaron la voz por los problemas de seguridad en el centro de la ciudad y, principalmente, por el peligro que significa transitar en las noches en la ciudad si no todas las cámaras de televigilancia están operando.
De acuerdo a la denuncia realizada por el concejal Renzo Aranda, apenas tres de las 16 cámaras están funcionando, lo que levanta una alarma no sólo en el edil, sino también entre la comunidad, que apenas el viernes de la semana pasada tuvo una reunión con la alcaldía quilpueína.
"Como concejal de Quilpué me veo en la obligación de manifestar mi profunda preocupación y descontento respecto a la alarmante situación de nuestras cámaras de vigilancia. De las 16 cámaras que deberían estar operativas para asegurar la tranquilidad y seguridad de nuestros vecinos, solo 3 están en funcionamiento. Este hecho es absolutamente inaceptable para una ciudad de la magnitud y relevancia de Quilpué", dijo.
Resulta particularmente indignante considerando que esta situación lleva años con el argumento siempre de la falta de recursos, pero recientemente se recibió una significativa suma de dinero proveniente de la Royalty Minero, donde solicité que consideraran proyectos para mejorar y dotar a la ciudad de sistemas de última tecnología en pórticos especialmente destinados a la instalación de cámaras de tele vigilancia con fondos que pudieron y debieron por ejemplo ser destinados a fortalecer nuestra infraestructura de seguridad", añadió el concejal.
Sin embargo, indicó que se encontraron con una situación "peor que antes", pues hay "menos cámaras operativas que nunca". "Esto refleja una grave falta de gestión y priorización por parte de la administración de la Alcaldesa Melipillán. Es imperativo que se tomen medidas inmediatas para rectificar esta situación. No podemos permitir que nuestros ciudadanos vivan con el temor constante por la falta de seguridad. La inversión en tecnología de vigilancia es crucial para prevenir delitos y para la rápida intervención de nuestras fuerzas de seguridad para también contar con medios de pruebas para la persecución penal de los delitos. La comunidad de Quilpué merece respuestas y acciones concretas".
La edil Mónica Neira recordó que cuando propuso implementar en Quilpué el convenio OS 14 "fue porque sabía que todos los avances que se podían implementar para darle mayor seguridad a nuestros vecinos era importante, más si iban a complementar las 16 cámaras de televigilancia ya existentes en diferentes puntos de la comuna. Estas cámaras no se han mantenido en el tiempo ni se han ejecutado nuevos proyectos de esa línea y las razones no se condicen con la realidad que vivimos en Quilpué".
Además, coincidió con la crítica del edil Aranda respecto a los recientes dineros recibidos por el Royalty. "Cuando vemos que existen ingresos de dineros, por ejemplo del Royalty, que se les da otra prioridad y no la de seguridad, que es el número uno para la tranquilidad de las personas, es que constatamos lo que venimos diciendo desde hace rato: Que esta administración del Frente Amplio hace lo justo para la muestra, pero no hay un real interés en trabajar para combatir la delincuencia y el narcotráfico".
El tema va más allá de la disputa política, porque hasta los mismos vecinos del centro reclaman la falta de soluciones. Magaly Cisternas, tesorera de la Junta de Vecinos E- 21, que comprende desde la Calle Miraflores paradero 28 por Los Carrera hasta calle Fonck (Freire), relata que en la reunión del viernes pasado, la alcaldía les habló "sobre el Plan de Seguridad Pública, pero nosotros lo consideramos insuficientes porque le llevamos un petitorio y le presentamos nuestro plan de trabajo, y el plan de trabajo que ellos tienen es, digamos, poco acertado, porque no hay una metodología en la dirección de Seguridad Pública ni en el plan territorial de la comuna. Entonces nuestra junta de vecinos observó la falta al no tener ellos una metodología adecuada, no tienen la información precisa, por lo tanto no pueden implementar ningún tipo de plan ni de prevención ni de ningún caso, y es por ello que no se ven carabineros en las calles".
Mencionó que no hay seguridad permanente en las calles y que "como junta de vecinos ya formada hace al menos unos dos meses, poco tiempo, ya tenemos delegados en cada calle. Entonces hemos dividido nuestro territorio con delegados por cada calle y hemos implementado una encuesta donde cada vecino ha podido participar, comentando sus principales quejas, comentando sus principales situaciones con respecto a la inseguridad y hemos detectado las principales falencias en cuanto a la seguridad pública. Por ejemplo, la poda de árboles, porque al no ocurrir, hay poca luminosidad, y tenemos problemas en los postes, luminarias que no se ven".
Uno de los problemas más grandes que tienen en cuanto a seguridad, dijo la dirigenta, es en la calle Camilo Henríquez, "con estas bandas que se han visto ahora y extrañamente hay cortes de luz... se corta la luz e inmediatamente se han visto los vehículos de los sectores estacionados en Camilo Henríquez afectados con robo de vehículos e inclusive asaltos a personas. Es complicado, sobre todo en el sector donde están los locales de comida, restaurante y locales, donde hay pubs la noche, las calles Camilo Henríquez, Aníbal Pinto, todo ese sector".
Al respecto, desde el Municipio indicaron que financiaron 52 proyectos de seguridad y muchos de ellos consisten en la instalación de cámaras de televigilancia, en el marco del Fondo de Seguridad Comunitaria del Municipio de Quilpué, que entregó más de $100 millones a proyectos de organizaciones sociales.
PURANOTICIA