Delegación Presidencial solicitó al Municipio de Valparaíso que ordene el cierre de al menos una quincena de estos locales comerciales a lo largo de toda la comuna, como una forma de evitar el consumo excesivo de alcohol entre las miles de personas que asisten al evento.
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La solicitud de cerrar una quincena de botillerías de Valparaíso para facilitar el desarrollo del siempre polémico carnaval Mil Tambores durante este fin de semana ha generado una fuerte controversia, escalando incluso a la vía judicial.
Los comerciantes porteños, agrupados en la Asociación Gremial de Botillerías de Chile, arribaron a tribunales acusando perjuicio patrimonial y discriminación en relación a otros establecimientos con presencia en la comuna, como supermercados.
En representación del gremio, el abogado Leonardo Contreras interpuso un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de Valparaíso, buscando inhabilitar cualquier dictamen que decrete el Municipio de la Ciudad Puerto a raíz de la solicitud emanada desde la Delegación Presidencial Regional para cerrar las botillerías.
El profesional señaló sobre el carnaval Mil Tambores que "no se hace cargo de la seguridad, no se hace cargo del mantenimiento del orden público y opta por establecer restricciones a los comerciantes de Valparaíso, en una fecha que es sumamente importante, como el fin de mes después del 18 de septiembre".
La acción judicial presentada ante el tribunal de alzada porteño busca dejar sin efecto cualquier resolución que emita la casa edilicia o, en su defecto, pedirle a la Corte de Apelaciones que impida que se dicte alguna resolución; esto, con el objetivo de que estos locales comerciales de la comuna no se vean afectados.
Cabe hacer presente que la medida planteada regiría a contar de las 20:00 horas, desde el sector de Montedónico, en la parte alta del cerro Playa Ancha; hasta Rodelillo, en la parte alta del cerro Los Placeres; incluyendo el plan de la comuna.
De igual forma, el abogado Contreras sostuvo que "nosotros no estamos en contra de la realización de la actividad porque sabemos que trae, de alguna u otra forma, un beneficio directo o indirecto para los comerciantes, para el negocio establecido, pero lamentablemente las autoridades, frente a su propia incapacidad y desidia, traspasan la responsabilidad a los particulares y eso no corresponde".
Por su parte, Michael Puentes, presidente de la Asociación Nacional de Botillerías y representante del gremio en Valparaíso, dijo que las pérdidas serían millonarias: "Estamos contabilizando dos días, es decir, un fin de semana completo donde claramente la venta aumenta. Por lo mínimo, una botillería te vende $500 mil por día, entonces en dos o tres días, son pérdidas considerables".
Desde el Municipio de Valparaíso explicaron que están evaluando y tomando en cuenta las recomendaciones que efectúa la Delegación Presidencial Regional, lo que incluirá una reunión con locatarios de los sectores afectados, "facilitando el funcionamiento de las botillerías y así evitar la venta ilegal de alcohol y darle mayor seguridad a quienes visiten la ciudad".
PURANOTICIA
