visitas
Paulina Vodanovic, renunciada o no, lo cierto es que desde la Democracia Cristiana hasta el Partido Comunista, pasando por el Frente Amplio, Radicales, Socialistas y PPD, más los verdes regionalistas y liberales, componen el amplio abanico de una centro izquierda que, digan lo que digan, tiene una consigna que los está diferenciando de sus oponentes y que quizás sea la gran gota que les pueda dar el triunfo en diciembre próximo: la capacidad de unirse.
Hace unas semanas vimos en la Fundación de Michelle Bachelet cómo ella a la cabecera hablaba con todos los candidatos del sector. Podemos escuchar cómo todos se preparan para encender el debate y comenzar a sentir el aroma de una Elección Presidencial que en esta versión espera repetir una de las máximas de los últimos gobernantes: para llegar a La Moneda, hay que ganar una Primaria.
Mientras la derecha saca cuentas alegres en las encuestas y prácticamente en el comando de Matthei los diferentes voceros comenzaron a repartirse los ministerios, subsecretarías y los diferentes puestos, en la esquina de los KK aún están tratando de dilucidar cuál de los dos se bajará para así pasar a segunda vuelta, por que si bien ambos (Kast y Kaiser) suman más que Matthei, el no bajarse uno de ellos asegura que la carta de Chile Vamos pase al balotaje, aunque no necesariamente todos los votos de Kast se irían a Kaiser ni viceversa.
Son dos escenarios distintos. Tohá, Winter, Jara y Mulet tendrán la oportunidad única de debatir, de tener franja televisiva, de acudir a debates, de mostrarse, de afinar un plan país en común.
Además la centro izquierda podrá definir si quiere por delante a una de las dos cartas que representan más la izquierda o bien se prefiere aquel denominado mundo de la Social Democracia que parece que tendría las mejores opciones de triunfar y por ende garantizar gobernabilidad.
Justamente aquello parece es lo que está en juego en esta Primaria y, al mismo tiempo, en la primera vuelta. Qué proyecto país ofrece la capacidad de gobernar. Por eso cuesta tanto entender las últimas actuaciones de Evelyn Matthei y los partidos de Chile Vamos con el show de las Primarias. Cuesta creer que Kast y Kaiser se perdieran la oportunidad de inscribir una Primaria y aniquilar prácticamente a RN, la UDI y Evópoli. En ambos casos no existe unión. Pareciera que mientras la derecha avanza con tres proyectos unipersonales sin unidad, por la centro izquierda se avanza en dispersión, pero con la capacidad de unirse. ¿Podrá ser vencida esa unidad? La respuesta a aquella ecuación sin duda ya se comenzó a escribir y parte con la capacidad de inscribir Primarias que un sector sí logro hacer, mientras que el otro no. Veremos qué peso tendrán en el futuro las decisiones que ambos sectores están tomando de cara a la presidencial.
