La destituida senadora se inclinó por el diputado oriundo de Viña del Mar, una figura que considera idónea para representar a la región de Valparaíso y continuar la línea política que ella ha defendido en las últimas décadas.
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Tras la resolución del Tribunal Constitucional que ordenó su salida del Senado, Isabel Allende (PS) ya tomó una decisión respecto de quién debería asumir su lugar en la Cámara Alta.
La exsenadora se inclinó por el diputado socialista Tomás de Rementería, una figura que considera idónea para representar a la región de Valparaíso y continuar la línea política que ella ha defendido en las últimas décadas.
La decisión de la exlegisladora se dio en el marco de una conversación abierta con el partido. “La presidenta del PS, Paulina Vodanovic, me expresó que quería que yo decidiera quién sería mi reemplazo”, habría compartido Allende con su círculo más cercano.
A partir de ese gesto, sostuvo reuniones con dos posibles nombres: Andrés Santander y Tomás de Rementería. Finalmente, optó por este último, actual diputado por Valparaíso y oriundo de Viña del Mar.
Si bien su nombramiento debe ser ratificado por el Comité Central del Partido Socialista este sábado, la señal política es clara. En el PS no es una regla escrita, pero sí una tradición que quien reemplaza a un parlamentario provenga del mismo sector interno. De Rementería, cercano a las posiciones históricas de Allende, cumple con ese principio.
Sin embargo, su eventual nominación no está exenta de desafíos. En noviembre se renovará la representación senatorial en la región, y el partido espera que quien asuma el cargo ahora esté dispuesto a competir en esa elección. En ese escenario, De Rementería enfrenta una situación compleja, ya que su pareja, la diputada Karol Cariola (PC), también postulará por Valparaíso. Según encuestas internas, ella es actualmente una de las candidatas con mayor respaldo en la zona.
Además de definir al sucesor de Allende, el Comité Central del PS discutirá si entrega su apoyo a Carolina Tohá de cara a una eventual primaria presidencial o si apuesta por levantar una candidatura propia. El nombre de Paulina Vodanovic, actual presidenta del partido, ha comenzado a tomar fuerza en ese posible escenario.
Así, el desenlace de este proceso no solo marcará el cierre de una etapa política para Isabel Allende, sino también el inicio de una nueva configuración interna en el socialismo chileno, con decisiones que podrían tener impacto en el escenario electoral de fin de año.
PURANOTICIA
