
Un ataque del Valencia terminó en un centro no tan peligroso que se suponía el arquero agarraría sin problemas, sin embargo el portero terminó metiéndola con su mano dentro de su arco. El guardametas acusó que el delantero le cometió falta en el segundo más importante de la jugada, sin embargo el árbitro no pescó y validó el gol.