¿Tienes muchos sobres de acondicionador de cabello de los hoteles de cuando viajas o que te traen otros cuando viajan? Entonces, tienes un tesoro, porque el acondicionador de cabello tiene muchos usos en el hogar súper útiles y que no imaginabas.
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1 Restauran un sweater encogido
No debe haber nada que me frustre más que arruinar un sweater que te guste por lavarlo mal. Aunque no es un 100 % efectiva, esta técnica para restaurar chalecos encogidos con acondicionador te ayudará. Mezcla una cucharada de acondicionador en un balde de agua hasta que se disuelva, luego introduce allí el buzo bien sumergido para que la tela de a poco pueda volver a su tamaño original.
2 Destapar el lavadero
¿Cañerías obstruidas? ¿Inodoro tapado? Destapa tu lavado y cañerías con acondicionador de cabello y agua caliente. Verás cómo esta mezcla logra lubricar las cañerías y así destaparlas.
3 Desatar cremalleras
¡No me puedo quitar el vestido! Si has pasado por esa situación de duda entre forzar la cremallera de una prenda o dormir con ella puesta, ¿te sucedió alguna vez? Pues, de ahora en más ya no te sucederá, porque ya sabes el truco del acondicionador para desatar cremalleras. Toma un poco y refriégalo sobre la cremallera para "aceitarla". Funcionará de maravilla.
4 Prevenir que las herramientas se oxiden
Herramientas sin óxido ni tétano, son herramientas con acondicionador, queridas amigas. Solo tienes que cubrirlas con un poco de acondicionador y estarán bien protegidas. Ah, y me olvidaba, también funciona con otras cosas, como los picaportes de las puertas o la grifería.
5 Limpiar acero inoxidable
Limpiar el acero inoxidable no es nada fácil y yo soy de las que les gusta que brille, ¿tú también? Entonces este es tu día de suerte, porque acabas de conocer el truco para limpiar el acero inoxidable con acondicionador. Solo tienes que tener la precaución de aplicar el producto de a poco sobre tus superficies de acero y luego limpias con un trapo limpio para dar brillo. ¡Me encanta!
6 Reparar una puerta que hace ruido
¡Qué ruido molesto, por favor! Abres, chilla, cierras, chilla, ¡voy a enloquecer! Por suerte, nuestro amigo el acondicionador ha llegado al rescate y con solo aplicar un poco en las bisagras o herrajes comenzarás a darle paz a tus oídos.
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Pn/gm
